23 diciembre 2009

EL TIEMPO NOS DIO LA RAZÓN: BAÑUELOS FUE MEJOR QUE BEJAR

Antes de iniciar los comentarios de la presente columneja, quiero decirle dos cosas a mis escasos lectores: la primera es una sincera disculpa por no haber “estado al aire” en estos días, pero es que diciembre está lleno de actividades sociales que me impiden escribir con la habitualidad que acostumbro y, la segunda, es desearles una feliz navidad en compañía de su familia, el deseo del próspero año nuevo se los doy después, antes que finalice el año en otra columna, espero tener la oportunidad de hacerlo.

Hace tiempo, en la trinchera preguntamos quien era mejor procurador, ¿Béjar o Bañuelos? Ambos son amigos de este escribano, pero eso es “harina de otro costal”. Aquí lo importante es hacer una evaluación, quizá muy subjetiva, de dos funcionarios públicos que representaban el corazón de dos gobiernos diferentes. EL gobierno de Toño Echevarría y el gobierno de Ney González. Ahora, los resultados están a la vista. Bañuelos a pesar de ser criticado como un no muy buen abogado, se fue con premios y reconocimientos nacionales e internacionales, tanto de instituciones como del FBI así como del sector privado nacional, quienes le dieron el espaldarazo como un excelente procurador de justicia. Pero también fue reconocido por las instancias gubernamentales del nivel federal al tenerlo como el presidente de la comisión de prevención del delito de la conferencia nacional de procuración de justicia nacional. Por el contrario, Béjar como representante del gobierno de Ney, quedó en el más completo descrédito social, quizá reconocido como muy buen abogado, pero como procurador quedó como los burros cuando no pueden con el tercio de leña que les echan. Y quizá gran parte de su completo desfiguro fue su poca voluntad para “ponerse colorado” desde el principio, sólo se limitó a obedecer órdenes y a solapar a quienes son dueños de la plaza que con toda seguridad no me refiero a la plaza hoy bicentenario. Por eso, siempre como amigo le dije: Béjar, no es lo mismo litigar que ser procurador. No entendió y su soberbia se lo tragó. Las cosas para Béjar hubieran sido diferentes si desde el principio pinta su raya, pero no, prefirió ser súbdito incondicional del virrey, quien se lo “llevó entre las patas” y hoy, para no dejarlo en lo más profundo del fango, le inventan una secretaría, le inventan un membrete que tendrá el mismo peso que un cuico del municipio del Nayar.

El virrey ya lleva dos procuradores, Toño Echevarría sólo tuvo uno y con ese pudo con el tercio. Vamos dándole el beneficio de la duda al ahora recién nombrado procurador, aunque les adelanto que se me hace muy “ojón para que sea paloma”, está muy ñoño. Pero dos procuradores ya son evidencia de que el gobierno de Toño fue mejor que el de Ney, son una evidencia de que no han podido con el asunto de la inseguridad debido al maridaje que hay entre las instituciones policiales y de procuración de justicia con los mañosos. Béjar no sólo fue incapaz de combatir la inseguridad la corrupción y la impunidad debido a ese maridaje, sino que ahora es criticado hasta por ser una “viga podrida”, situación que desde mi muy particular punto de vista no es creíble, dada la alta proclividad de mi amigo Béjar de ser muy macho.

Por el contrario, Bañuelos Ahumada, vive tranquilo, sereno, con la frente en alto por haber cumplido con honores y reconocimientos, la encomienda que le encargó el entonces gobernador Toño Echevarría. Béjar por el contrario, estará como artículo suntuario en la nueva secretaria de seguridad pública, recluido en una oficina, cobrando su “quincenuca” sin mando de nada, ni poder de nada. El poder lo tiene el procurador porque esta es la figura reconocida en la ley, es la que ratifica el congreso que es donde, reside la máxima representación soberana del pueblo, aunque la última y plena soberanía reside solamente en el pueblo. Hasta ahí quedará Béjar, esperando la finalización del gobierno de Ney. Si en algo le hubieran agradecido haberse dedicado a obedecer sin chistar, por lo menos lo hubieran hecho secretario general de gobierno, en lugar del rápido y veloz Roberto Mejía, pero no, lo redujeron a cuije sin pistola en un periodo del gobierno que ya agoniza. Si en el fondo de su pecho le quedara algo de dignidad a mi amigo Béjar, debiera de no aceptar cargo alguno y dedicarse a hacer lo que sabe hacer excelentemente bien. Como político mi amigo Béjar quedó como piltrafa. Así es como quedan aquellos que no son leales con quien les dio la mano, aquellos a quienes hasta las oficinas de Abasolo y Querétaro les prestaron y quienes sin el menor recato dan el salto mortal hacia otras opciones políticas que practican la política del Kleennex: úsese y tírese. En fin, el tiempo nos dio la razón, con esto termino con los comentarios de mi amigo Béjar a quien le dimos consejos por este medio, pero estaba ciego, jamás entendió, se había subido al ladrillo de la procuraduría y se despegó de la tierra. Hoy, resignado en un mar de descrédito social, dejará de ser noticia, por lo que esta nota será la última que le dedico, pues ya tiene más importancia hablar del “tacón” que del nuevo aviador del gobierno.¡Que tengan feliz navidad en compañía de sus seres queridos! robertogbernal@gmail.com

PD. ¡Muy pronto el capítulo 71 de la novela del asesino de vacas! ¡A los 80 publicamos el libro! www.anecdotasesino.blogspot.com Digamos no al reemplacamiento de vehículos, muy pronto habrá una respuesta ciudadana a esa decisión tan arbitraria como primitiva, muy propia de este gobierno. ¡Estemos al pendiente! ¿Sabes cuanto costó el evento televisivo que duró toda una semana y que sirvió de adorno al cuarto informe de gobierno? ¡Y si eso no bastó, seguramente que habrá informes de lo mismo en el Distrito Federal y quizá hasta en el extranjero!¡No habrá dinero para pavimentar calles, pero si para eso y cosas más para pagar el culto a la personalidad del gobernante! ¡Viva Nayarit cab…nes!

OTRA DENUNCIA CON NAVARRO ¿Y?

CON NAVARRO QUINTERO EN 2018 ¿Y?