Resulta que los perdedores de la
recién pasada contienda política para renovar la dirigencia en el Sindicato de
Personal Académico de la UAN (SPAUAN), de entre todas las alternativas
políticas que tenían para mantener su lucha escogieron la siguiente : “Se
quedarán dentro del SPAUAN y se
mantendrán como una corriente para pelearle a los “feuanos” y a la rectoría, el
control del sindicato hasta donde la gente quiera. Ganaron (Con Sigifredo) 15
escuelas y con Marcial 3; Carlos Muñoz perdió 18 centros de trabajo y ganó 18
comprando el voto porque basificaron 150 de contrato y perdieron (los de Sigi)
por 140 votos, porque se vendieron los de Santiago por la dirección de la
escuela y los de Villa Hidalgo por una promesa de incrustar gente en la
administración actual”. ¿Qué tal? Vamos opinando acerca de esa percepción del
resultado.
Que
se van a quedar dentro del SPAUAN. ¿Y qué van a hacer sin tener ninguna
representación legal?¿Esperar otros tres años a ver si en la siguiente elección los
académicos les dan el apoyo? ¿Acaso no se darán cuenta que no le van a poder
hacer nada a Carlos y, llegado el momento impondrá a su sucesor con el apoyo de
Nachito Peña? ¿Acaso no se darán cuenta de que ya con el control del sindicato
muchos de los que los apoyaron van a sucumbir ante Carlos por la razón que sea
(comodidad, temor, conveniencia, indolencia, etc)? ¿Qué no se darán cuenta de
que Nachito Peña hará hasta lo imposible por reforzar la posición de Carlos
porque es un contrapeso contra el “Pelón” Hernández Escobedo? Desde aquí les
digo a los compañeros que, con todo respeto, esa es una postura políticamente
infantil si en verdad de lo que se trata es de defender los derechos laborales,
porque si se trata de solamente lograr algunos espacios de poder quizá sea
convincente, pero, si esa es la postura, la de conseguir espacios, se me hace
una posición muy pobre y de visión corta, porque tener un espacio en la
administración no significa realmente gran cosa, ni en términos económicos ni
políticos.
Que
van a disputarle a los “feuanos” y a la rectoría el SPAUAN hasta donde la gente
quiera. Con todo respeto pero de plano se me sigue haciendo un visión muy
estrecha. Disputar la rectoría y el SPAUAN debió de darse en el marco de la
lucha por la rectoría, todo era en paquete. Si de verdad hubieran querido eso,
como maestros hubieran impugnado el resultado de la elección de rector y un VEZ
IMPUGNADO, con esa moneda de cambio, intercambiarla por el control del SPAUAN,
o sea, políticamente lo que debieron haber hecho era poner de rodillas a los
feuanos y a Juan López Salazar con la impugnación ,e incluso, con la toma de rectoría
o de las oficinas del sindicato y, sobre esa base, negociar que les dejaran el
SPAUAN. Pero en lugar de eso, le hicieron el caldo gordo a Juan López Salazar y
a los Feuanos que dicen combatir, aceptaron tranquilamente un proceso
completamente sucio y amañado y luego, en condición de desventaja, se pusieron
a competir al SPAUAN. No se necesitaba bolita de cristal para saber que iban a
imponer a Carlos.
Que
compraron votos y basificaron a 150 de contrato. ¿Y qué esperaban? La verdad
siguen con posturas infantiles, y se los digo con todo respeto. Permitieron un
proceso de rector completamente inequitativo, amañado, sucio, y también
permitieron un proceso igual en el SPAUAN. Para empezar, solamente a ustedes se
les ocurre permitir que el padrón se los ponga la rectoría y no la junta de
conciliación y arbitraje. Es como si ponen la iglesia en manos de Lutero o como
a mi me sucedió cuando la sala superior del tribunal electoral del poder
judicial de la federación quien, para no alterar la relación
Estado-Universidades, no defendió mi derecho ni me hizo justicia y en contrapartida, me puso en manos de quienes iba
yo a combatir o sea a las mafias universitarias quienes son juez y parte de los
procesos. ¿A quien se le ocurre aceptar que los que vayan a votar los ponga el patrón?
Que compraron votos. ¿Eso es nuevo para ustedes? Que basificaron 150 ¿También
es nuevo? Los que defendimos al SPAUAN durante mucho tiempo de las embestidas
de la rectoría sabemos que esas jugadas son de kínder. Si ni siquiera
impugnaron el proceso por esas situaciones amañadas, menos harán otras acciones
que realmente representan acciones de defensa de los derechos laborales.
Que
los de Santiago Ixcuintla se vendieron por la dirección y los de Villa Hidalgo
por promesas de darles espacios administrativos. ¡Pero que novedad! Esa ha sido
la práctica siempre en esos lugares. En un contexto donde los académicos ven un
espacio pichurriento en la administración como la posibilidad de ganarse unos
cuantos chelines más, eso no es novedad. Para muchos maestros ganarse unos
cinco o diez mil pesos mensuales más es una maravilla. Esa es su visión, es
como las despensas con gorgojos que entrega el PRI a cambio de votos. Con eso
se dan y no les importa que al rato nos anden "rasurando" las clausulas del
contrato colectivo de trabajo o de plano nos mutilen otras.
De
verdad yo lamento que hayan tomado ese camino porque dejan de construir una
gran fuerza política con representación legal que les permita no solamente
mantener vigencia política, sino ser una gran fuerza para defender el contrato
colectivo de trabajo y sanear la universidad como nuestro espacio de trabajo.
Si se construyera esa gran fuerza política con representación legal, Nachito Peña
no andaría haciendo ocurrencias como esas de crear mas burocracia y ya hubiera
iniciado la transparencia y el saneamiento de la institución. Quedarse dentro
del SPAUAN es echar a perder todo ese capital político que, sin bolita mágica,
desde aquí les pronostico que dormirá el sueño de los justos y, hasta que no haya
otra elección, a lo mejor se animan a hacer las cosas de otra manera.