En un video que realiza Evaristo
ya esta listo, se entrevista al dirigente del SPAUAN, Carlos Muñoz Barragán.
Ahí declara el dirigente en comento que lo que el SPAUAN requiere del nuevo
rector son tres cosas: 1) Las basificaciones de 600 compañeros de contrato; 2)
Transparencia en el fondo de pensiones y 3) mejoría en el servicio médico
universitario. Desde luego que estamos de acuerdo en eso, aunque es una postura
muy limitada porque se deja fuera todo el tema académico y lo que ello implica,
desde los incentivos por aumento de productividad, pasando por el desarrollo de
la investigación científica, hasta la modificación del modelo académico que
culmine en un proceso de reforma universitaria donde se cambie la obsoleta legislación
que regula la vida de la universidad. Pero bueno, nos limitaremos a comentar
esos tres aspectos que para el dirigente de esa organización son los que espera
del nuevo rector.
Lo
primero que salta a la vista es una pregunta: Si esos temas son añejos ¿Por qué
hasta ahora que son tiempos de elecciones salen a relucir? Desde luego que no
faltará aquel que me diga que más vale tarde que nunca, lo cual es cierto,
pero, ¿Por qué esperar hasta que esté el nuevo rector? Lo que han declarado
respecto del tema de las basificaciones es que ya hay un acuerdo con la
secretaria de educación pública para eso, lo cual no dudo que hayan generado
ese acuerdo pero, ¿Por qué no le muestran a los académicos universitarios algún
documento firmado por la misma SEP en donde se establezca dicho acuerdo? Itero,
no dudo que lo tengan pero las cosas que están pasando en el país no son en el
sentido de dar basificaciones sino al contrario, es en el sentido de sanear las
universidades públicas. Y si esto es asi, entonces los que somos muy mal
pensados sospechamos que esas supuestas basificaciones no son otra cosa mas que
una manipulación política para venderles espejitos a los 600 de contrato para
que voten por mi amigo Carlos y con ellos lograr la reelección. Desde luego,
esta afirmación que hago se cae al suelo si Carlos Muñoz o el rector Juan López
muestran los documentos públicamente en el sentido de que tienen autorizadas
esas basificaciones. De lo contrario pueden ser afirmaciones huecas, demagogia
pura, con tintes políticos que caen en
el terreno de la manipulación, tal como aquellas afirmaciones que se dieron con
la crisis de pagos que se dio en el diciembre negro por la falta de pago de los
aguinaldos. Si ya tienen la autorización de la SEP pues es tan fácil como que
al rector Juan López le pueden servir para salir con aplausos de su gestión al frente
de la Universidad. Por eso itero la pregunta anterior ¿Para qué esperar a
basificar a la gente de contrato hasta el nuevo rector?
Y
de la misma manera: ¿Para qué esperar al nuevo rector a fin de que haya
transparencia en el fondo de pensiones? Si es una demanda añeja derivado de que
el fondo tiene muchos años operando con números rojos, es mas, ya ni se debería
hablar del fondo de pensiones porque no existe fondo. De lo que se puede hablar
es de lo que fue el fondo, y transparentar lo que fue el fondo de pensiones
porque todos sabemos que ya no existe. Hablan de transparencia en el fondo de
pensiones pero jamás dicen en qué consistió la negociación del fondo de
pensiones que se supone ya hicieron porque ya firmaron los nuevos contratos colectivos
de trabajo. Los trabajadores docentes y administrativos activos y pensionados y
jubilados no tienen ninguna razón en sus manos para esperar a que se nombre al
nuevo rector para que les digan en que se fue el dinero, en qué se lo gastaron,
porque ya alguna vez el mismo rector Juan López dijo que quienes tronaron al
fondo tienen nombre y apellido, pero además, tenemos todo el derecho de saber
qué fue lo que negociaron y firmaron porque ya llevaron los contratos a la
junta de conciliación y arbitraje.
Y
la misma situación en el tema de los servicios médicos universitarios. Quienes
acudimos ahí somos los viejos, los que ya tenemos muchos años entregando la
vida a la institución porque los nuevos son enviados al seguro social. Para nadie
es desconocido que el servicio médico universitario está para llorar y, si
esperamos de aquí al nuevo rector, pueden suceder hasta muertes en estos tres meses que faltan para el nuevo rector
porque los que tenemos ese servicio ya padecemos todas las enfermedades y
estamos propensos a morirnos en cualquier momento.
Para
los tres temas se requiere dinero. Si son basificaciones es dinero, si es el
nuevo fondo también se ocupa dinero y si son servicios médicos de la misma manera. ¿Qué candidato
a la rectoría puede traer dinero y que
no se sujete nomas a gastar el asignado en el presupuesto? Hasta ahora, los que
se manejan no tienen las conexiones suficientes como para hacer eso. Quienes se
manejan no tienen relaciones suficientes y necesarias para traer dinero, asi
que lo más seguro es que con nuevo rector seguiremos en las mismas. Por eso les
digo a los universitarios, la universidad no requiere un rector cualquiera, un
rector burócrata o un pusilánime que se deje secuestrar por los grupos de poder
internos que a la postre han llevado a la universidad hasta esta situación. Hoy
los académicos tienen la oportunidad de actuar para ser los protagonistas
principales del rumbo universitario y no dejar que otros personajes que son
aves de paso en la UAN decidan la vida universitaria, es el momento en que los
académicos deben rescatar la verdadera importancia que deben tener en la definición
de la vida universitaria. Los convoco a que se organicen para hacer sentir su
peso político y moral en la definición del rumbo universitario. robertogbernal@gmail.com
PD. Si no actúan, después no se vale quejarse. www.trincherauniversitaria.blogspot.mx