Hay una lista de siete aspirantes que
pretenden ser presidente del Instituto
de Transparencia y Acceso a la Información. Uno de ellos es el ingeniero
José María Robles Naya, quien es el responsable de la unidad de enlace en la
Universidad Autónoma de Nayarit.
Para
empezar, la ley de transparencia en su artículo 43 arábigo 3, establece que
para ser presidente se requiere tener título de licenciatura y hasta donde se
sabe, el señor no es licenciado, es ingeniero. De hecho, la comisión respectiva
lo tuvo que haber eliminado de la primera lista de nueve que presentaron
documentos. Seguramente que quienes lo apoyen me van a decir que la
licenciatura se refiere al nivel pero si es así, entonces la ley debiera decir
que se requiere licenciatura o equivalente, lo cual no dice. Entonces pues,
para empezar el señor no reúne los requisitos legales.
El
arábigo 4 del mismo artículo dice que debe haberse desempeñado con probidad en
el servicio público o en actividades profesionales, académicas, empresariales,
o culturales. Probidad significa honorabilidad, honradez, integridad, rectitud,
decencia y moralidad. Valores que por supuesto el señor los tiene porque nadie
lo ha descalificado por eso. Sin embargo, es necesario hacer algunas
aclaraciones pertinentes en lo que a mí respecta debido a la forma en que se ha
conducido en la Universidad con su último trabajo como Enlace de la
transparencia en la UAN.
Les
informo que solicité a la Universidad toda la información relativa al fondo de
pensiones de la UAN, porque muchos universitarios creemos que dicho fondo ha
sido manejado discrecionalmente al grado de estar a punto de quiebra. Pues
bien, dicha solicitud fue respondida por quien es el responsable de las
finanzas universitarias negándola pero reconociendo que se encuentra en sus
archivos, actuando por tanto con dolo y mala fe.
Recurrí
al ITAI usando la ley y el recurso de revisión que ahí se establece. Dicho
recurso fue contestado, ilegalmente, por el titular de enlace o sea por José
María Robles Naya, quien usurpando las funciones de la secretaria de finanzas y
administración, asumió un papel que no le correspondía, lo cual es muestra
evidente de que no tiene la probidad que marca la ley.
En
sus respuestas se niega evidentemente a entregarme la información solicitada. En
su respuesta miente reiteradamente. La primera mentira que dice es que no se me notificó que la
información que solicité la tenía la Universidad. Tengo los documentos para
probar que si me notificaron eso. Otra mentira es que cita la dirección
electrónica www.uan.edu.mx/es/transparencia en su numeral 10 para demostrar que
lo relacionado al fondo de pensiones se encuentra ahí. Miente, los invito que chequen esa página y me digan si
encuentran la relación de pensionados o los instrumentos de inversión donde
están depositados los recursos, que es parte de la información solicitada. O
sea pues, el señor es un mentiroso de cuerpo entero, lo cual lo hace un
aspirante perverso para ocupar la presidencia de dicho instituto.
En
su desesperado intento por no entregar la información, señala que esa
información no es de la Universidad lo cual no es trascendente porque si se
genera, se administra o se posee, se debe entregar, así lo dice en artículo
cuatro de la ley. También dice afirmaciones sin sustento o razonamientos
jurídicos pues como dogma de fe dice que la información solicitada no es
fundamental.
De la misma manera actuó
con dolo, pues si él sabía que la información la tenía el fideicomiso o el
mismo fondo de pensiones, de conformidad con el artículo 53 de la ley, debió
remitir mi solicitud de información EN ESE MOMENTO, a las instancias que el señaló, y no actuar
de mala fé retardando y negando la información. En fin, con todo esto quiero decirles
a los diputados que una persona así no merece estar al frente de una
institución muy importante para nosotros los Nayaritas. robertogbernal@gmail.com
PD. Y eso sin decirles cómo,
presumiblemente, con un crédito de 150 mil pesos construyó la mansión donde
vive, con portón eléctrico, recámaras y escaleras hechas con maderas preciosas
que reflejan un gusto exquisito. A lo mejor fue asesorado por el ingeniero
Antonio Rodríguez o ¿será que la mansión es fruto de los amarres de la fábrica
de agave? O quizá es amigo de Ney donde presumiblemente tiene unos terrenos a
un costado de los que presuntamente tiene el ex gobernador por ahí por
Matanchen. ¡Viva la transparencia! www.trincherauniversitaria.blogspot.com