15 enero 2018

SIN SOLUCIÓN CRISIS FINANCIERA DE LA UAN

Escuché un audio en el que el rector de la UAN, Jorge Ignacio Peña González, explicó el tema del pago de prestaciones de diciembre. A final de cuentas, la postura fue sencilla: se pagará con recursos del presupuesto 2018. Con esa postura, señaló el mismo que para diciembre volverá a presentarse el problema. En sus palabras dice: “la bomba ya estalló”.
            Sorprenden varias cosas: La primera es que las cosas se dicen con una tranquilidad que emocionaría al más ecuánime del mundo pues simple y sencillamente se nos dice que se deja de pagar conforme a la ley y ahora resulta que hasta tenemos que aplaudirles porque nos pagan lo que ya se devengó fuera de lo establecido en la ley, sin que ello se traduzca en fincar responsabilidades a quienes tienen la obligación de cumplir en tiempo y forma con los sueldos y prestaciones. Tal parece que violar las leyes sin que haya responsables es el pan de cada día en nuestro estado. Por eso interpusimos una primera denuncia ante la fiscalía por ejercicio indebido de funciones y lo que resulte, contra el rector de la UAN.
            En segundo lugar, se insiste en decir que el problema es que el gobierno federal no nos da dinero. En el audio señalado, el rector Nacho Peña señala que el gobierno federal ya les dijo que cuando cumplan la parte que como universidad nos corresponde, en ese momento tendrá el apoyo federal. Debido a eso, señala que realizará una revisión de la nómina, en donde reconoce que el problema no se resolverá quitando aviadores. Tan sólo por mencionar un ejemplo, señaló que en el nivel medio superior solamente hay ocho personas que no tienen carga horaria, aunque faltaría revisar la gente que tiene carga horaria pero que no cumple. Lo mismo habria que hacer en el nivel superior pero que, lo que puede pesar es en la administración central porque ahí no hay controles.
            En tercer lugar, destaca en dicho análisis rectoral, la ausencia de señalamiento a algunos privilegios que hay que eliminar de inmediato, asi como no hay una explicación acerca del saqueo que se ha hecho durante mucho tiempo y que se constituyó como una bomba de tiempo que tenía que estallar en su momento. Como lo dice un académico de Bahía de Banderas “Resolver quienes fueron los culpables del supuesto desvío de recursos en el sexenio pasado es la asignatura pendiente…….Terminar con aviadores, gente improductiva y simuladora, dejar de subsidiar costosas estructuras principalmente de FEUAN y SETUAN, retirar todas las canonjías que tienen la guardería, primaria y secundaria “setuanistas”, ser austeros en el gasto corriente, y hacer que aquellos docentes que detentan tiempo completo de cualquier categoría, cumplan a cabalidad con su carga horaria que marca su contrato, y no las 3 o 4 horas a la semana que acuden (y por eso no se sienten aviadores, que por lo regular estos últimos, son políticos o funcionarios públicos de los tres niveles de gobierno en sus tres poderes) marcaría ahorros sustanciales, pero no resolverían el problema financiero”.
            Por ejemplo, si el rector presionara a las autoridades estatales para que se esclarezca hacia donde se fueron cerca de 35 millones de pesos que se dispusieron de ellos con aquel pago doble que se les quitó a todos los trabajadores activos en tres quincenas y que no se sabe a dónde fue a parar y, si a eso el rector recuperara los setenta millones de pesos que se le dieron a la empresa fantasma San Petersburgo y que Juan López facturó y, si a eso recuperara los casi 500 millones de pesos transferidos de la federación a la universidad para fortalecer el fondo de pensiones que ya no existe y que no se sabe dónde quedaron, y si a eso le sumamos recuperar todo el impuesto sobre la renta que nos quitaron a  los trabajadores y que no se entregó a la Secretaria de Hacienda y que tiene endeudada a la UAN por cerca de 400 millones de pesos, por causa de esos saqueadores, nomás con eso tendríamos entre setecientos u ochocientos  millones de pesos para solventar la crisis financiera. Si a eso le sumamos quitar los privilegios de los mal llamados “sectores” que dice el académico de Bahía de Banderas, no tendríamos que andar con el Jesús en la boca pensando lo que ya el propio rector nos está anunciando: que desde noviembre de este año vamos a tener el mismo problema. Pero el rector no puede hacer eso porque significa afectar la estructura política que lo sostiene, así como tampoco puede encarcelar y quitarle el dinero a quien lo puso como rector, es decir, a Juan López Salazar y su presunto “socio” como es el ex gobernador Roberto Sandoval.
            Por eso yo les digo a los universitarios y al pueblo en general que, para resolver el problema financiero de la UAN necesitamos un rector que no esté comprometido con los saqueadores, con quienes han hundido a la UAN en este pantano financiero. Se requiere un nuevo rector que convoque a una nueva elección donde previamente haya un marco legal diferente para la elección, es decir, se requiere una reforma a la ley orgánica que modifique la forma de elegir rector para que éste no sea preso o rehén de las mafias universitarias, mal llamadas “sectores”, y de paso sentar las bases para un nuevo modelo universitario.
PD. EL rector Peña ya anunció que a fines del 2018 se volverá a presentar el problema, lo cual habla de su incompetencia para estar al frente de la rectoría. ¿Qué más necesita para renunciar? Es la demanda inicial del STUAN.
           



OTRA DENUNCIA CON NAVARRO ¿Y?

CON NAVARRO QUINTERO EN 2018 ¿Y?