27 diciembre 2017

¡SE SUICIDA EL RECTOR DE LA UAN!

 Eran las 12 de la noche de ayer cuando circuló en las redes sociales  el rumor de que el rector de la Universidad Autónoma de Nayarit, Jorge Ignacio Peña González, había sido encontrado muerto en el interior de su recámara en la casa que actualmente habita.
            Sin embargo, no había nada oficial, sólo rumores. Pero no tardaron las autoridades universitarias en confirmar su muerte. Luego después, de manera oficial, el ministerio público daba fe de los hechos, de tal manera que la muerte del universitario fue confirmada.
            La comunidad universitaria se había conmocionado y daba muestras de ello mediante diferentes opiniones en las redes sociales, todas en el mismo sentido. No aceptaban que, aunque no hubiera pagado la segunda quincena de diciembre ni las prestaciones decembrinas, hubiera tomado esa drástica decisión de quitarse la vida. La muerte no se le desea a nadie.
            Las causas de tamaña decisión tomada por el rector no se saben, sólo se desatan algunas especulaciones, sin ningún fundamento. Las más ligeras y superficiales dicen que se había intoxicado con grandes dosis de alcohol, las que había consumido en exceso durante este tiempo de fiestas navideñas. Especulación nada creíble porque se sabía que el rector no era un consumidor asiduo de bebidas espirituosas. De hecho, se confirmó mediante un pequeño exámen que le hicieron a su sangre donde se reveló que no había consumido ni alcohol ni ningún tipo de droga.
            La especulación que más era creíble en las redes sociales fue aquella que planteaba que le había agarrado una fuerte depresión porque no podía resolver el problema de la crisis financiera y, preso de tanta depresión, mejor se decidió por tomar el rumbo equivocado. Se había cortado las venas y su muerte fue lenta por el desangrado que sufrió.
            Y es que su gestión al frente de la Universidad había venido de fracaso en fracaso al grado tal que ya parecía un simple limosnero que solo estiraba la mano al gobierno federal y al estatal para pedirles dinero y, cuando le cierran las puertas tanto la SEP como el gobierno estatal porque ambos le exigieron que limpiara la institución, no supo que hacer y tal parece que decidió no ser el rector más incompetente de todos los que ha tenido la institución.
            Su proclividad por mantener los privilegios y su nula voluntad política de sanear la institución y, muy por el contrario, seguir manteniendo el clima de corrupción interna lo había llevado a un callejón sin salida. De hecho, pudo haber resuelto las cosas bien, pero prefirió acostarse políticamente con los corruptos en lugar de pasar a la historia como el primer rector que asumía un verdadero papel institucional. Lo había vencido el “pelón” Hernández Escobedo para que le mantuviera sus cotos de poder y privilegios y, aparte, tenía el compromiso con la FEUAN para seguir manteniendo esta costosa estructura política universitaria y, ya no se diga mantener una costosa nómina universitaria llena de parásitos. Ante esas exigencias, el nulo apoyo de los gobiernos estatales y federales, y su nula presencia con personajes políticos y empresariales de alto nivel para poder darle solución al problema, lleno de depresión y tristeza, Nacho Peña prefirió huir por la puerta falsa cortándose las venas.
            Se dice que sus principales funcionarios lloraban como fieles plañideras su partida al más allá. Mientras que había otros que ya se relamían los labios ante la posibilidad de ser ungidos como el nuevo rector. De hecho, algunos ya se habían ido a hincarse ante el corruptazo del “pelón” Hernández Escobedo para que les diera la bendición. De hecho, el propio corruptazo de altos decibeles, el “pelón” Hernández Escobedo, se supo que había dicho entre sus principales colaboradores que la historia lo había puesto en una posición tal que, sin duda alguna, sería el nuevo rector y que sin duda alguna contaría con el apoyo del nuevo gobierno y que, bajo esas condiciones, prefería, en lugar de ser diputado federal plurinominal, que mejor se sacrificaría asumiendo la rectoría de la Universidad Autónoma de Nayarit y asi todos le agradeceríamos ser el nuevo rector.
            Sin embargo, noticias de última hora, señalan que el rector solo había estado en un profundo sueño que parecía que estaba muerto ya que fue hospitalizado de urgencia y fue salvado de la muerte, porque las galletas marías con las que se había cortado las venas no estaban tan filosas como para hacerle un pequeño rasguño. Inocente palomita que te dejaste engañar. Es 28 de diciembre, día de los inocentes. El rector de la UAN goza de cabal salud junto a su familia, a quien le deseo un exitoso año nuevo.

PD. ¡Ya paga Nacho! ¡Si no puedes, renuncia!

OTRA DENUNCIA CON NAVARRO ¿Y?

CON NAVARRO QUINTERO EN 2018 ¿Y?