Ya comenzamos a ver al nuevo
gobernador en plena actividad. Se pasea tranquilamente por diferentes lados
saludando a los ciudadanos de manera serena. Visitó a Roberto Sandoval en
palacio de gobierno para instalar formalmente la entrega de los “tiliches” los
que, seguramente, serán cuentas maquilladas, sin dinero en ningún lado, maquinaria
inexistente o toda desvencijada, mobiliario y equipo todo deteriorado y en
otros lados, como en salud, pues ni jeringas va a encontrar.
Y
bueno, en ese trajinar, también fue a “tentalear” el terreno en la Universidad
Autónoma de Nayarit, donde fue recibido por las autoridades universitarias. Ahí
fue entrevistado por los medios de comunicación en donde no hizo declaraciones
muy comprometedoras, solamente que apoyará con todo a la Universidad y que va a
esperar a ver qué le dejan en el gobierno para empezar a tomar decisiones. Una
posición política prudente e inteligente desde mi punto de vista.
Pero
bueno, aquí lo importante no es solamente el hecho de la simple visita
protocolaria. El gobernador Echevarría hace muy bien en iniciar conversaciones
con la autoridad universitaria, es muy importante mantener una sana relación
institucional. Sólo espero que no se vaya a convertir en cómplice de las mafias
universitarias que han hundido en el descrédito a la UAN y que ahora no
encuentran como salir del pozo en el que ellos mismos la metieron. Sería muy
lamentable que el gobernador Echevarría simplemente replique las posturas de
todos los gobernadores anteriores en el sentido de decir que “respetarán la
autonomía universitaria” y con ello darles patente de corso a las mismas mafias
para que sigan haciendo de las suyas.
Que
no se le olvide al gobernador Echevarría que al final de cuentas, con todo y la
dichosa autonomía universitaria, el gobernador en turno es el jefe de todas las
instituciones de Nayarit y, por tanto, también es responsable del futuro de la
Universidad. Su función no es solamente darle dinero para que internamente
sigan reproduciendo el mismo esquema de corrupción y privilegios internos, sino
que su función es que las instituciones y los encargados de ellas construyan
instituciones sanas que le sirvan al pueblo ya que al final de cuentas, el
dinero con el que se sostienen las instituciones es dinero del pueblo de
Nayarit, no es ni del gobernador ni de los universitarios.
En
su tiempo, al padre del gobernador Echevarría, salvó a la Universidad de mucho
problema financiero. De hecho, me tocó estar en varias reuniones de las
autoridades y los mal llamados “sectores” con el gobierno y la comisión de
educación del congreso y desde entonces, siendo rector Castellón Fonseca, se
les decía que había que combatir a los aviadores y había que transparentar el
ejercicio del dinero público. Castellón nunca hizo caso, solamente armó un
circo en el hotel que está a un lado de palacio de gobierno y fue todo. Publicó
las nóminas, pero inmediatamente las quitó porque salió a flote todo el
cochinero que adentro hay. O sea, pues, Castellón Fonseca y sus cómplices como
es el “pelón” Hernández Escobedo, combatieron políticamente a Toño Echevarría
para seguir con la corrupción interna y, en contrapartida, Toño los apoyó
siendo gobierno para que hicieran las cosas bien. Pero prefirieron el lodo y el
resultado ahí está a la vista: la UAN en plena crisis financiera y con un alto índice
de falta de credibilidad social. Desde entonces la UAN era una bomba de tiempo
que le estalló a Nacho Peña quien va a tener que sacar el lodo “a güevo” o será
su caída de la rectoría.
El
gobernador Echevarría seguramente ya sabe que no hay dinero en la UAN, porque
con toda certeza el rector le tiró el sablazo de que lo apoye para pagar en
noviembre y en diciembre dado que ya se le acabó el agua al bule en la UAN. ¿De
donde va a sacar dinero el gobernador? Está en chino. El estado está lleno de
agujeros financieros. Todos piden dinero y, obviamente, todos estirarán la mano
para que el gobernador les apoye. ¿Y éste donde va a caer para sacar dinero?
Tiene que acudir al único cajón donde está el dinero: Peña Nieto. Obviamente,
con una elección federal encima, donde el gobierno no es priista, las cosas no
se pondrán color de rosa.
Pero
hay una salida inmediata con la que el gobernador Echevarría puede ayudar a la
Universidad a salir del problema financiero inminente que se viene para
noviembre y diciembre: QUE META AL BOTE A JUAN LOPEZ SALAZAR Y RECUPERE PARTE
DEL DINERO QUE SE ROBÓ. La salida al problema inmediato de noviembre y
diciembre se resuelve con traerse a Juan López y entregue lo que se robó tanto
por lo que lo denunció el órgano de fiscalización como por la denuncia de fraude
por setenta millones de pesos que le tengo en la fiscalía. Y creo, no lo
aseguro, que Juan López pagó setenta millones de pesos bajo el pretexto de la
dispersión de la nómina, lo cual es una verdadera vacilada pagar setenta
millones porque te dispersen la nómina, porque le dieron mucho, pero mucho más
dinero, a cambio de dar setenta millones. Casi aseguro que los setenta
representan el diezmo de lo que le dieron o sea setecientos millones de pesos.
Eso no lo puedo asegurar, pero lo intuyo porque anduve cerca de ese tema. La
realidad solamente sale de la investigación que realicen las autoridades.
PD. Mientras tanto, el
gobernador ya sabe del agujero financiero de la UAN………mañana le hago una
réplica al “pelón” Hernández Escobedo. Estará buena, será de botana porque es
la última de la semana.
