Ahora que
obligadamente, forzosamente, la comisión de responsabilidades y disciplina del
Consejo General Universitario tiene que emitir un dictamen acerca de la
petición de remoción de Juan López Salazar, los académicos universitarios
tienen en sus manos la posibilidad de que el rector sea removido de la rectoría
y, en consecuencia, tenga que enfrentar a la justicia por haber usurpado una
función pública sin tener los requisitos legales para ello. Es candidato al
cereso.
Ante mi demanda de amparo, con el número de expediente
1110/2015, el Juez federal acordó así: “Se admite a trámite la demanda de
garantías: Solicítese a las autoridades responsables, sus informes
justificados; Se señalan las diez horas con once minutos del diez de julio de
dos mil quince para que se lleve a cabo la audiencia constitucional; Dése al
agente del ministerio público de la federación la intervención que legalmente
le compete. Con fundamento en el artículo 8º. de la ley federal de
transparencia y acceso a la información pública gubernamental, se hace saber a
las partes que pueden manifestar su oposición a que se publiquen sus datos
personales”.
Coloquialmente esto significa que ya no van a seguir
manteniendo silencio ante la petición de remoción del rector. La ley los obliga
a emitir un dictamen. Y Aquí es donde los universitarios pueden hacer que la
universidad ya no siga siendo enlodada por las mafias, aquí es donde los universitarios
pueden hacer que se cumpla el estado de derecho en la Universidad, aquí es
donde los académicos pueden rescatar su papel tan importante que deben tener en
la vida institucional y no seguir siendo el sector que no incide para nada en
el funcionamiento de la Universidad y muy por el contrario se han dejado
maltratar y violentar sus derechos mas elementales.
Todos sabemos que la dichosa comisión de
responsabilidades y disciplina está integrada por los llamados líderes de los
sectores (SPAUAN, SETUAN y FEUAN) junto con el rector Juan López. Por supuesto,
Juan López no puede ser juez y parte en ese dictamen. Pero, es de sobra
conocido que si dejamos a los lideres solos en la decisión para tratar el tema
de la ilegalidad del rector, el resultado ya sabemos cuál será. Emitirán un
dictamen en el que se establezca que no procede la remoción.
A los estudiantes en general se les hará difícil opinar
sobre eso, porque hace cuatro años, los que ahorita son estudiantes ni siquiera
estaban en la universidad, excepto los que hoy cursan los ultimos años de las
carreras. Pero a los académicos si nos consta que Juan López no cubría los
requisitos para ser rector. Sin embargo, las mafias universitarias consumaron
un acto de corrupción violentando toda la legalidad universitaria y pasándose
por el arco del triunfo la ley orgánica, lo impusieron.
Ahora tienen que decidir si es legal o no su presencia al
frente de la UAN. Por supuesto, si dejamos solos a los lideres en esa decisión
van a decir que es legal. Pero si los académicos universitarios exigen que su
líder lleve la opinión de todos los académicos a esa comisión donde se decidirá
la legalidad o no del rector, entonces
seguramente que Carlos Muñoz va a tener que decir en el seno de la comisión que
la presencia de Juan López es ilegal. Con esa decisión, Juan López no solamente
cae de rector y la universidad empezaría a componerse porque se haría valer el
estado de derecho, sino que además iría directamente a la cárcel. De eso yo me
encargaría.
¿Se animarán los académicos universitarios a obligar a su
líder a llevar la decisión de ellos al
seno de la comisión? ¿Les saldrá la casta a los académicos universitarios
luchar por la defensa del estado de derecho? ¿Los académicos que se movilizaron
en las calles por la defensa de la ley en diciembre pasado, ahora se
movilizarán para defender la ley y exigir la salida de Juan López? ¿Los
estudiantes que piden que se combata la corrupción en la UAN y que se respete
la ley también se movilizarán para que su líder Aldrete no tome una postura
unipersonal que no representa a los estudiantes universitarios?
La cabeza de Juan López Salazar puede rodar de un momento
a otro si se da la movilización. Si no hay movilización ni defensa del estado de
derecho, entonces con su indolencia y apatía todos se convierten en cómplices
de la corrupción universitaria. Nosotros ya hicimos la parte que nos toca, ya
solicitamos la remoción con base en la ley y ya acudimos a las instancias
federales para hacer que la ley en la Universidad camine. Faltan los
integrantes del SPAUAN, los del SUNTUAN, los estudiantes de la FEUAN, los
trabajadores del SETUAN, y aquellos universitarios que aunque no tienen
personalidad jurídica como organizaciones formales, si tienen vigencia real en
la vida universitaria.
Y no se trata de quitar a Juan para poner a otro igual o
peor. Se trata de que con ello se restablezca la legalidad universitaria y al
mismo tiempo se inicie un proceso de reforma de la ley para acabar con los
vicios políticos que tienen hundida a la Universidad. La universidad no
funciona bien porque su rector, aparte de ilegal es un inútil, no tiene sentido
académico de las cosas. La oportunidad aquí está para los académicos. Si Carlos
Muñoz actúa de manera unipersonal en el seno de la comisión, les da otro motivo
a los académicos para que su cabeza también caiga por no respetar sus propios
estatutos. robertogbernal@gmail.com
PD. Si se fijan, el
juez federal hizo mención del agente del ministerio público federal y de la ley
federal de transparencia. Con esto les digo solamente que las mafias
universitarias no van a poder salir fácilmente de este asunto. Están
acostumbrados a hacer legal lo ilegal. Pero mas allá de las paredes
universitarias y de la autonomia, hay leyes, y la UAN se rige en primer lugar
por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos….¡Pónganse las
pilas académicos universitarios! www.trincherauniversitaria.blogspot.mx