Apenas anda terminando el proceso
electoral intermedio y ya analistas, mitoteros, calientes y demás especímenes
que se interesan en el argot político, ya están pensando en la carrera por la
gubernatura. Es un tema muy tempranero para andar ya preguntándonos el tema de
la sucesión. Sin embargo, no quiero dejar pasar la oportunidad para compartir
con mis escasos lectores en número de cuatro, mi opinión personal sobre ese
tema.
Para
empezar, falta mucho tiempo de aquí al 2017. Los suspirantes por dicho huesito
seguramente que primero han de pensar en la manera de garantizarlos de vida, ya
no digamos de alcanzar lograr conquistar esa posición. Son casi tres años los
que faltan para estar en dicho proceso, así que de aquí a esas fechas pueden
pasar muchas cosas.
En
segundo término, el escenario político final aún no se configura plenamente. Ya
hay algunos caballos listos para esa carrera. De los contendientes del pasado
proceso que salieron triunfadores ya hay algunos que pueden estar en dicha
pelea. Incluso puede haber más de alguno de los perdedores que también haga su
luchita para ese tiempo. Pero también falta ver bien que es lo que sucede en el
2015 con las elecciones federales porque es un hecho de que los que salgan
triunfadores de este proceso electoral también serán aspirantes por la silla. Y
falta también apuntar a los legisladores federales que no se cambian hasta en
ese tiempo. Es decir pues, aún hay movimientos previos que tienen que pasar
para saber quiénes son los gallos para el 2017 en que el gobernador tiene que
dejar la silla.
Un
dato muy peculiar para ese proceso es lo que ya anda en boca de algunos: La
caballada esta flaca en los diferentes partidos. En el caso del PRI y aliados,
los analistas que reparten la vida de los Nayaritas al sabor de un buen café
dicen que hasta ahorita ahí nomás hay dos gallos: Gianni y Cota. De ahí en
fuera dicen que no hay mucho que ver. Algunos tratan de revivir muertos
políticos pero la verdad es que no hay mucha tela de donde cortar.
En el caso del PRD las
cosas están para llorar. El único que puede levantar algo de polvo es el casi
diputado Pavel Jarero, de ahí en fuera párenle de contar. Castellón quedó hecho
pedazos, en cada elección pierde y las posiciones que ha ocupado son de regalo,
así que, como no ha mostrado competitividad electoral ya quedó enterrado. Otros
andan queriendo revivir muertos como el Judas Nayarita Acosta Naranjo de quien
a estas alturas del partido no sé si haya algún despistado que de una moneda de
a peso por este buen mercader del PRD. Ni modo que los perredistas se atrevan a
candidatear a la “rata universitaria”.
En el caso del PAN hay
más gallos…..y gallinas. Sin embargo es menester reconocer que en mi partido el
único que puede abanderar un buen proyecto por la gubernatura es Polo
Domínguez. Así como en un tiempo fui insistente públicamente en el sentido de
que era el único que le podía ganar al PRI, ahora sostengo que en el caso de PAN,
es el único que puede abanderar un proyecto político hacia la gubernatura que
puede tener éxito frente a los demás adversarios. Sin duda, falta que Polo haga
un buen gobierno para mantener e incrementar su legitimidad social, el reto que
tiene enfrente está duro y si no hace un buen gobierno las cosas para é se
pondrán difíciles.
Desde luego que hay
otras opciones, incluso para ese tiempo el partido Morena de López Obrador
también estará en la palestra política para ser otra opción distinta. Y ahí
pueden salir nuevos gallos o gallinas para la gubernatura que no han tenido
opción de participación en los partidos tradicionales donde las mafias han
hecho su agosto. Con esto quiero decir pues que la carrera por la gubernatura
aun esta lejana, faltan muchos eslabones, hay muchas cosas que involucraran a
nuevos actores que aun no salen al escenario político, pero pueden salir.
Sin duda alguna, en el
caso del PRI las cosas no serán definidas por el ejecutivo estatal como en esta
elección donde puso a sus candidatos. Aquí
las cosas las verá con lupa el presidente de México, de hecho desde las
candidaturas a diputados de este 2015. El margen de maniobra político que va a
tener el gobernador se reducirá. Esperemos las cosas en esta carrera, es
temprano aun. robertogbernal@gmail.com
PD. ¿Por qué las mafias universitarias
le piden al gobernador que obligue a los alcaldes a que paguen lo que les
deben? ¿Acaso no hay un marco jurídico que se pueda aplicar para todos aquellos
funcionarios que desvían los recursos públicos? Hay mucha impunidad y
corrupción en Nayarit y todos actúan en silencio, como si no pasara nada, se
hacen de la vista gorda y lo que estamos haciendo es construir un Nayarit lleno
de complicidades mutuas. www.trincherauniversitaria.blogspot.mx
