Este articulo nace motivado por las
declaraciones del dirigente de la FEUAN, quien señaló que habría que investigar
cuales son las razones por las que la Universidad Autónoma de Nayarit esté
fuera del TOP de las 250 en Latinoamérica. Y es que el dirigente citado no
alcanza a explicarse las causas de esa catástrofe institucional porque muchos
indicadores de evaluación, según su decir, han aumentado considerablemente. Y
como no encuentra explicación, dice que a lo mejor hay “mano negra”.
Desde
luego, comparto las preocupaciones del dirigente. Pero lo que me gustaría enfatizar
es el hecho de que ya no sólo somos algunos inconformes los que decimos que las
cosas al interior de la UAN están mal. De hecho, cuando estaba el rector
Castellón, la UAN fue catalogada por las comisiones evaluadores de la SEP como
la cuarta peor del país, sólo por encima de la Oaxaqueña, la Chiapaneca y otra
que se me escapa. Ahora lo hace una institución Londinense que hace el ejercicio de evaluación de las universidades
latinoamericanas de manera anual.
O
sea pues, ya no solamente somos algunos universitarios atrevidos los que
decimos que las cosas andan mal en la UAN, hay otras voces. Pero las mafias
universitarias, unos con tal de tenerla de trampolín político, otros para hacer
negocios familiares y personales con ella como es el caso del “pelón” Hernández
Escobedo, sólo ellos se empecinan en tapar el “mierderío” que hay adentro. Y
para ello usan mucho la autonomía universitaria.
Cuando
decimos que hay cosas muy malas en la UAN no es por desprestigiar a nuestra
institución. Es para corregir los males y que las autoridades correspondientes
tomen cartas en el asunto. Por
eso se hacen evaluaciones institucionales aunque los universitarios que vivimos
diariamente la vida universitaria no necesitamos que ni la SEP ni instituciones
extranjeras vengan a evaluarnos para saber que estamos mal. Pero solo quienes
tienen intereses perversos alejados del verdadero espíritu universitario
señalan que las cosas están muy bien pues eso les permitirá conseguir y escalar
posiciones públicas y a otros amasar fortunas incalculables.
¿A
poco estamos bien cuando un juez sanciona a un ex director por acosador sexual
y hostigador laboral y en contrapartida el consejo general universitario lo
exonera? La moral de todo el consejo aquí quedo hecha pedazos. ¿A poco estamos
bien cuando los investigadores ganan premios nacionales pero se quejan de que
la Universidad no apoya la investigación? ¿A poco estamos bien cuando los
académicos y trabajadores son mal pagados donde además les regatean sus prestaciones pero en
contrapartida tenemos líderes y funcionarios universitarios que se enriquecen?
¿A poco estamos bien cuando hay un fondo de pensiones técnicamente en quiebra
financiera? ¿A poco estamos bien cuando las becas se distribuyen con criterios
políticos? ¿A poco estamos bien cuando las carreras que deben fortalecer
nuestro entorno económico regional están prácticamente sin alumnos? ¿A poco
estamos bien cuando producimos profesionistas que se convierten en desempleados
ilustrados? ¿A poco estamos bien cuando hay simulación académica? ¿A poco
estamos bien cuando le preguntan a un diputado federal que es profesor
universitario cuyo suplente es precisamente el líder estudiantil, acerca de
tres libros que lo hayan marcado y no sepa que decir? Casi respondió que eran Corín
Tellado, Lagrimas y risas y Memín Pingüin.
¿A poco estamos bien
cuando se ejerce un gobierno universitario caciquil y autoritario que no
permite que los derechos constitucionales
se ejerzan al interior de la UAN? Y esto lo digo para el mismo sector
estudiantil, pues todos sabemos que al interior de la UAN, mediante el
estatuto, legalizaron lo que es ilegal, corporativizaron a la FEUAN e impiden
con ello la libre asociación (Derecho constitucional) de otros estudiantes. Lo
mismo han pretendido hacer en el plano de los trabajadores por eso a nosotros
el STUAN nos cierran puertas y tratan de desaparecernos, pero ¿saben cuándo lo
lograran? Nunca, porque habemos universitarios con convicciones firmes para
hacer valer el estado de derecho en la UAN.
Estas pocas reflexiones deberían
servirle al dirigente estudiantil para que empecemos a dar respuesta a las interrogantes que tiene acerca de por
qué la UAN está en las peores de Latinoamérica, y no le sirvan para que se vaya
a comportar como aquellos investigadores que andan buscando como se le mete el
agua a los cocos o esos que quieren descubrir el agua tibia o los que les
buscan chichis a las gallinas. robertogbernal@gmail.com
PD. Desde luego, mi visión no es
maniquea, en el sentido de que todo está negro y las mafias internas digan que
todo está blanco. Hay avances, pero corrigiendo esos males pudiéramos estar
mucho mejor. El problema es que esos males se originan en esos intereses
perversos que hoy por hoy tienen postrada a la UAN de rodillas y catalogada
como una de las peores de Latinoamérica. Lo estamos viendo en el “cambio” de
SPAUAN. www.trincherauniversitaria.blogspot.mx
