31 octubre 2011

EL DRAMA DE MARIA TERESA EN EL GOBIERNO DE NEY GONZÁLEZ


María Teresa Peña González cuenta la odisea que le ha tocado vivir desde 2008 en que sufrió la sustracción de su menor hijo, Luis Enrique Mejía Peña. El niño fue sacado de la escuela a la que asistía, sin consentimiento de la madre, por el padre, del que estaba en trámite de divorcio. Es cierto que es una historia que se repite constantemente, pero la situación vivida por María Teresa se agudiza porque su todavía esposo (sigue el divorcio en trámite) resultó ser primo hermano de la esposa del ex gobernador y del senador Mejía González.
Por eso se le cerraron todas las puertas de la justicia. El entonces presidente del tribunal Superior de Justicia de Nayarit, José Armando Gómez Arias, resultó ser consuegro de Salvador Mejía González, otro hermano de Charo y Raúl y por ende cuñado del ex gobernador. La secretaria de la juez segunda de lo familiar, donde se ventilaba el juicio de divorcio, de nombre Karla Mejía Arciniega, es hija de un hermano de José de Jesús Mejía Mariscal, el esposo de María Teresa, por lo que todo tipo de trámites era bloqueado y más los referentes a la recuperación de su hijo Luis Enrique.
Viviendo el drama de la pérdida de uno de los tres hijos que tuvo con Mejía Mariscal, María Teresa buscó alternativas, solicitando ayuda al ombudsman de aquel entonces Óscar Herrera López (ex procurador de justicia), quien en lugar de atenderla la mandó con el presidente del Consejo de la Judicatura, quien al mismo tiempo fungía como presidente del TSJ, quien se burló de ella con un mensaje “jajaja, no te atendieron en Derechos Humanos y ahora dónde vas a ir, ¿a la Comisión Interamericana?”, le cuestionaba.
Empeñosa como es la jalisciense de nacimiento y empresaria buscó alternativas y recurrió al Instituto Nacional de la Mujer y a la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres (ya que durante su matrimonio fue objeto de violencia y maltrato por parte del esposo). El Instituto de la Mujer envió cartas al presidente del TSJ, solicitándole imparcialidad y justicia, mientras que la Fiscalía encontró diversas anomalías, que van desde bloqueos, retrasos y violaciones procesales.
Pero eso no es todo, al hacer la denuncia de sustracción del menor, le fue requerida la presencia de su otro hijo, Erick Manuel Mejía Peña, a quien sometieron a sesión psicológica, sin la asistencia de la madre, ya que dentro del sitio se encontraban su padre y su hermano mayor, los que lo exhortaban a que se fuera con ellos.
El drama de María Teresa tiene más de tres años y no advierte solución ni al trámite de divorcio, ni a la recuperación de su hijo y ante todo vive amenazada e intimidada por autoridades y familiares del esposo, que en muchos de los casos son lo mismo. Una ejemplificación de ello es que la sufrida madre acudió ante la familia de su marido con resultados negativos.
Primero buscó al senador Raúl Mejía González, primo hermano de su marido, cuñado del ex gobernador, quien le dijo que la iba a ayudar, pero le pidió que no hiciera público el asunto, porque se convertiría en asunto político y en forma intimidatoria le preguntó “¿no te da miedo eso?”. Luego le comentó que tendría que ayudarla por debajo del agua, para que no lo odiara su primo José de Jesús, sin que jamás moviera un dedo.
También buscó a la hermana del senador y esposa del ex gobernador Charo (Rosario) Mejía González, a la que explicó la situación, obteniendo como respuesta que dejará las cosas en paz, pues su hijo quería estar con su papá. Buscó también, mediante una carta, la intervención del ex gobernador Ney Manuel, sin que hasta la fecha, dos años después, hubiese recibido respuesta de la misma. La esperanza de esta mujer para recuperar a su hijo, luego de tres años de frustración es que el nuevo gobierno de Roberto Sandoval, quien no hace eco de las prácticas de nepotismo e influyentismo que caracterizaron al mal gobierno Neycista, se haga justicia. Su temor es que Ney siga con su influyentismo en el gobierno de Sandoval y se prosiga con la protección política hacia esa familia y que en contrario, sus otros dos hijos, menores también, puedan ser sustraídos, con la ayuda de la corrupta justicia de Nayarit. Como se advierte, los excesos y omisiones del ex gobernador González Sánchez fueron en todos los terrenos y no solamente en los terrenos de lucha contra la delincuencia, escasa obra y pocos beneficios para la ciudadanía.
Desde esta humilde tribuna le hacemos un exhorto a nuestro gobernador Roberto Sandoval para que no haga oídos sordos a este tipo de reclamos de una madre desesperada, a quien se le volcó en su contra todo el aparato de poder estatal con el fin de proteger a quienes están ligados con el ex gobernador más corrupto que hemos tenido los Nayaritas. Este tipo de tráficos de influencias deben ser borrados del mapa Nayarita, este tipo de atropellos a los mortales ciudadanos que por desgracia caen en posturas contrarias a esa familia real deben ser borrados de la vida de Nayarit y este tipo de personajes políticos que abusan del poder, es necesario que ya también sean sometidos a la justicia y al imperio de la ley. robertogbernal@gmail.com
PD. Desde esta tribuna hago pública mi postura de sumarme al llamado del gobernador para trabajar unidos por Nayarit en el tema de la inseguridad, y como ciudadano les exijo a mis “representantes populares” que se sumen al llamado del gobernador para que el penal ubicado en el Rincón se vaya a las islas marías www.trincherauniversitaria.blogspot.com

OTRA DENUNCIA CON NAVARRO ¿Y?

CON NAVARRO QUINTERO EN 2018 ¿Y?