Desde el domingo pasado, Martha Elena decidió salir del ostracismo político, de la modorra política, dejó ya de lado la incertidumbre que agobiaba a los ciudadanos para iniciar ahora un activismo político con miras a la gubernatura. El domingo pasado, dio un informe de actividades ante cerca poco más de dos mil quinientos Nayaritas que se congregaron en el rancho el Quevedeño para abrazar nuevamente la idea de estar aglutinados alrededor de Martha Elena. En dicho evento, lo importante no fue su discurso, sino su presencia que reflejaba el abandono de la pasividad política que la caracterizaba.
Pero más importante aún, fué la entrevista que le realizaron en la televisión local el lunes por la noche. En dicha entrevista, Martha Elena ya palpó que el pueblo no votó por ella para que fuera una simple diputada, sino para que fuera gobernadora. Ya se dio cuenta Martha Elena que el pueblo le está exigiendo que asuma su responsabilidad social e histórica de abanderar a un pueblo hambriento no sólo de empleos y bienestar, sino hambriento de justicia y seguridad. Ante el sutil reclamo disfrazado de felicitaciones que el pueblo le hizo para que sea gobernadora, y ante la insistencia de Rogelio Zúñiga, conductor de la entrevista, Martha Elena no tuvo otra opción más que decir: Si el pueblo quiere yo quiero, emulando a Toño Echevarría, quien al calor de esa frase se lanzó a la conquista de la consulta ciudadana dos años antes del proceso electoral.
Pero Martha Elena debe tener claro, y espero que lea estas líneas, que construir una candidatura competitiva para la gubernatura rebasa el simple nivel de andarse promoviendo con la presidencia de la comisión de equidad y género. La construcción de una candidatura competitiva tiene que pasar por hacer trabajo político de mayor profundidad, de mayor compromiso, mucho más que andar haciendo foros, congresos o traer políticos de peso nacional a Nayarit. Para empezar, debe iniciar su promoción política por todo el estado de Nayarit, no solamente circunscribirse a hacer actividad política en la capital del estado. En ése peregrinar debe ir formando su estructura propia, muy diferente a la del PRD. Esta estructura propia estaría integrada por gentes no sólo del PRD, sino de todos los partidos políticos y sin partido. Esta es una tarea que requiere del concurso de mucha gente, no basta solamente con sus asesores. Tan sólo Martha Elena debe responderse a este tipo de preguntas: ¿Cuál es su equipo? ¿Quiénes la van a acompañar en las regidurías, en las presidencias municipales, en el congreso? ¿Quiénes son sus alfiles? ¿O será simplemente ella la candidata y va a dejar que las mafias partidarias se despachen con la cuchara grande quedándose con todo el pastel político y a ella solamente reducirla a tenerla de figura decorativa en la gubernatura del estado?
Pero por otro lado, construir una candidatura competitiva, pasa por ir haciendo acuerdos con líderes de opinión, con líderes regionales, con organizaciones civiles, sociales y políticas distintas de los partidos políticos. Y esto lo digo porque ya ha habido muestras de que no se quiere hacer eso, pero como ahora Martha Elena ya declaró públicamente que “si el pueblo quiere yo quiero”, pues va a tener que empezar a demostrar que de verdad quiere ser gobernadora o por el contrario solamente pasar a la historia como una diputada Nayarita que tuvo la presidencia de la comisión de equidad y género. ¿Tiene Martha el apoyo de ganaderos? ¿De cañeros? ¿De la burocracia? ¿De los maestros? ¿De transportistas? ¿De empresarios? ¿De estudiantes? ¿De universitarios? ¿Y los campesinos? ¿Ejidatarios? Hay mucho por hacer en este sentido, y más cuando el año venidero, el gobernador va a disponer de muchos millones de pesos para usarlos políticamente y posicionar a su candidato a la gubernatura.
Pero también construir una candidatura competitiva y ganadora a la gubernatura del estado pasa por trabajar políticamente para construir la alianza, por dialogar con las dirigencias nacionales de los partidos para que ella sea el factor de unidad de todos, por lo menos del PRD y del PAN. Obviamente que para eso Martha Elena tiene que “cabildear” mucho en el plano nacional. Amén de otros elementos que se requieren para tener esa candidatura competitiva, entre ellos el discurso político, el cual con toda certeza ya deberá de rebasar el nivel asistencialista y pasar al manejo de grandes proyectos de desarrollo local que impacten en el crecimiento económico y por tanto en el empleo, proyectos de cómo abatir la inseguridad y la injusticia y en cómo abatir la impunidad y la corrupción, que por cierto fueron parte de los diez puntos de los compromisos de campaña como diputada y tal parece que ya están olvidados. Entonces, si es cierto lo que Martha Elena declaró por la televisión local, en el sentido de que sí quiere ir por la gubernatura, entonces hay mucho trabajo político por delante y ello requiere que primero organice a su propio equipo. Acosta Naranjo no se duerme, trae operadores políticos pagados, por cada distrito. Esperemos que la declaración de Martha Elena no haya sido sólo “llamarada de petate”. robertogbernal@gmail.com
PD. Hoy es el día internacional contra la corrupción ¿Habrá algún funcionario público que sea enjuiciado así como para hacer honor a este día o todo será limpio, transparente y pulcro? Por lo menos el órgano superior de fiscalización debería hacer algún pronunciamiento para, por lo menos, “taparle el ojo al macho”, pero, tal como están las cosas, seguramente que van a tomar como slogan oficial la divertida frase de un amigo universitario que a brazo partido, junto con otros más, luchábamos contra la corrupción universitaria, decía así: ¡Contra la corrupción hasta que nos emparejemos! Esta semana, capítulo 69 de la novela del matón de vacas www.anecdotasesino.blogspot.com
