Como se los he estado anunciando a mis escasos como aguantadores lectores, estaremos dando datos del caso Silva Gámez, un caso típico de corrupción, impunidad, injusticia, atropello y represión, en el que muchos funcionarios universitarios y gubernamentales están saliendo “embarrados”. Al parecer Silva va a llegar hasta las últimas consecuencias para que se le haga justicia, incluso al grado de internacionalizar su caso. Hoy les seguiré dando más información derivada de la entrevista con el “interfeuto” dijeran en mi rancho. Silva dice así.
“¿Recuerdan aquello de la exhumación del cadáver laboral de Jesús Silva Gámez en el cual se encontraron vestigios de tortura? Pues la necropcia arrojó aún más datos de interés. El grupo de “invisibles entes” infiltrados en la cúpula administrativa de la UAN, en su “jueguito” queriendo imitar al crimen organizado también tienen a su “mochaorejas”, y pruebas de la existencia de éste tipo de engendros salieron a la luz cuando apenas el bisturí había incidido la epidermis momificada del cadáver laboral. O sea, nomás le hice una “rajadita” al cadáver y empezó a salir la pus, la podredumbre, que enseguida te explico.
Aprovechando lo bueno que le dejó Vicente Fox a México, Silva recurrió a la ley de transparencia y acceso a la información pública que en su versión estatal (vigente a partir del día primero de enero de 2008) señala a los sujetos obligados (art. 7°) para darnos información a los “pobrecitos mortales”; así, en la fracción 6 “emboleta” a las Universidades Públicas. Haciendo uso de esta Ley, el 12 de enero del presente año, Silva solicita a la unidad de enlace y acceso a la información de la UAN, una copia de su expediente personal. Le entregan su “expediente histórico personal” o sea la cabeza del cadáver exhumado y oh!! Sorpresa, el mochaorejas ya había actuado mutilando la información que por estrategia y por ley la Universidad debería de tener en el archivo. Resulta que en su archivo personal, no existe absolutamente nada acerca de la rescisión del contrato de Silva Gámez. Dice Silva: “Yo creo que ni un iluminado en matemáticas o en física nuclear podría explicarme, sin muchas explicaciones, lo que aún no me he podido explicar. En la información que la UAN entrega a Silva el 22 de enero del presente año con el oficio SAI-UAN 001/09 se detecta que la Universidad no puede comprobar por qué no le está pagando a Silva desde octubre de 1989”. Y continúa Silva diciendo así.
Trataré de explicarlo. En la información aparecen documentos que acreditan a Silva como profesor de la UAN desde 1980 y también como seleccionado por examen de oposición el 29 de septiembre de 1981 para obtener la categoría de tiempo completo, pero por arte de magia, no aparece el oficio que da por terminada esta relación laboral, es decir, la rescisión del contrato. Así también por la información citada, se tendrá que consultar el calendario azteca o los rollos del mar muerto para descifrar como le va a hacer el Sindicato de Personal Académico de la UAN (SPAUAN), con la “braza caliente” que representa el caso laboral de Silva, ya que éste sindicato siempre rebajó las cuotas sindicales del salario de Silva y, cuando se trató de que el SPAUAN defendiera a Silva, no lo hizo, dejando al “pobre Silva” colgado de la brocha cuando se supone que la cuota sindical debe servir para defender los derechos laborales del trabajador. Ahora, el SPAUAN, le tendrá que regresar a Silva todas sus cuotas sindicales más los respectivos intereses.
Por lo anterior y muchas cosas más, es evidente la falta de precaución de los “marranitos” para hacer el trabajo escatológico de la UAN. Asimismo, es preocupante que a la máxima casa de estudios, con todo ese gran bagaje de intelectuales, se le haya terminado la inteligencia y haya recurrido a la violencia de una manera tan ridícula (falsificación de firmas: fojas 45 y 47 del expediente 17/89 de la junta local de conciliación y arbitraje) y (desaparición de estos mismos documentos del archivo de la UAN). Cuando inicia el pleito entre Silva y la UAN, esta institución se “autoamarra las manos” al presentar documentos apócrifos para sustentar sus argumentos (estos documentos apócrifos son verdaderamente risibles y rayan en la comicidad), y luego se “autoamarra las patas” haciendo perdedizos tales documentos. Cuando Silva se los solicita respaldado en la ley de transparencia y acceso a la información pública, la UAN no los entrega porque seguramente no los tiene. Habrá que revisar el artículo 89 de esta ley y lo que dicen sus fracciones 4,5,6 y 9 que explican la manera legal para resolver asuntos como éste del asesinato laboral de Silva Gámez. Ojalá y no tenga que rodar cuesta abajo y arrastre a la ley de responsabilidades de los servidores públicos y pueda bajar hasta el fondo y vayamos a encontrar ASOCIACION DELICTUOSA. Lo más difícil para la UAN será comprobarle a la ciudadanía Nayarita y a la comunidad universitaria que el asunto de Silva Gámez, no es un burdo caso de represión donde intervienen instancias gubernamentales. Por lo demás, falta aún denunciar públicamente las horrendas diferencias entre los expedientes de la Universidad, de la junta local y el existente en el colegiado de distrito. Espero que nuestro amigo Miguel Madero actúe con profesionalismo ante este caso, espero que a Miguel le salga la casta y el gobierno no haga oídos sordos a lo que se establece en el acuerdo nacional para la seguridad, la justicia y la legalidad, porque hasta ahorita tal parece que le pegó embolia y la enfermedad de Shakira, no ve, no oye y está mudo”
Hasta aquí dejo la entrevista. Seguiremos mostrando los datos que Silva nos proporciona. Yo espero que las autoridades rectorales actuales tomen al toro por los cuernos y le den solución a este horrendo caso de injusticia, atropello, impunidad y corrupción. robertogbernal@gmail.com
PD. Esta semana, el capítulo 33 de mi novela “El “asesino” de vacas que llegó a ser presidente municipal”, a los ochenta se publica el libro. Visiten www.trincherauniversitaria.blogspot.com aquí encuentran la trinchera sin recortes ni censuras y en www.anecdotasesino.blogspot.com encontrarán capítulos atrasado de mi novela.