Ayer leí en las redes
sociales un escrito de uno de los lisonjeros del “rarito” Antonio Echevarría
García. Obviamente, le destacan unas inexistentes virtudes al grado de ponerlo
casi al nivel de Mahatma Gandhi, cuando en realidad este chiquillo imberbe no
es más que un vulgar traficante de influencias que tiene la insana como
perversa intención de presentarse como lo que es, una falso redentor, para usar
el gobierno con el fin de seguir acumulando riqueza bajo el amparo del poder.
Cuando leí el contenido de dicho artículo, en el que lo
alientan para gobernarnos, no pude reprimir una sonora carcajada y en la
soledad de mi cuarto de estudio exclamé: ¡Mejor el “cero ligas”! un invertido
más simpático que el “rarito” que bien pudiera disputarle una candidatura
ciudadana a gobernador entre el mundo gay.
Y hacen referencia a un evento que se desarrollará el día
de hoy tratando de emular a su padre, el filosofo y pitoniso ex gobernador que
tuvo arranque de caballo fino y parada de burro en su paso por la gubernatura.
Pero ¡ah! La diferencia entre el ex tigre Toño y su “rarito” cachorro es
abismal por no decir que infinita. Para poder ganar la gubernatura Toño tuvo
que mostrar sus gónadas sexuales a la estructura de poder local, gónadas
sexuales que dudo mucho que las posea el imberbe muchacho, sobre todo si se
trata de combatir a delincuentes enquistados en las instituciones
gubernamentales. ¿O querrá limpiar las instituciones a besos y abrazos?
En su tempranero destape a la gubernatura, seguramente
habrá quienes registren los hechos de hoy como actos anticipados de campaña. Y,
desde luego, con ese registro, sus guajiros sueños de querer gobernarnos a los
Nayaritas quedarán como lo que son, una locura juvenil proveniente de una mente
tan infantil como perversa.
Las lisonjeras frases que leí, no dejaban duda a la
zalamería. Dicen que por ser un Nayarita por nacimiento es garantía de lealtad
hacia su origen. Si se refieren a que su origen es Nayarit no hay certeza de
lealtad. Ney también es Nayarita y miren como nos dejó hasta la madre de
jodidos. Ney y los Echevarría son lo mismo, ambos son traficantes de
influencias. Ahora que si se refieren a que su origen es ser parte de la clase
empresarial es cierto, es leal a eso porque usa al gobierno para seguir
acumulando riqueza, es fiel a sus principios.
Luego sigue a todo lo que da la zalamería: que tiene
valores y servicio a la comunidad. ¿Cómo le hacen para aparecer como redentores
ante la gente necesitada que no es otra cosa mas que una postura ruin y
mezquina de mercadear con las necesidades de los mas jodidos? Tal parece que le
hacen como las empresas en el teletón: destinan dinero de las empresas como
publicidad a esas causas y luego lo rescatan vía impuestos porque son
deducibles. Así, el dinero destinado a publicidad de sus empresas lo destinan a
su fundación Álica, ésta fundación compra lentes, sillas de ruedas, despensas y
todo lo que signifique comprar la conciencia de la gente (igual que el PRI) y
después rescatan ese dinero de los impuestos que pagamos los Nayaritas. Y asi
la gente los adora por regalarles esas cosas. ¿Y cómo es que se hicieron de tan
grandes negocios si Toño era un simple profesor universitario que quizá
estuviera ahorita como nosotros exigiendo claridad en el fondo de pensiones de
la UAN?. Ah pues la respuesta está en el tráfico de influencias. Doce años de
secretario de finanzas, luego gobernador, la señora diputada federal, luego
senadora y ahora como a ellos ya se les acabó la cuerda, pues entonces quieren
al “rarito” para que siga el mismo camino. ¡No tienen llenadera!
En el clímax de la lisonjeria casi lo compararon con
Jesucristo. Dicen que su reto es ser el Salvador de Nayarit. Si Nayarit fuera
el mundo, entonces me están hablando de Jesucristo como el Salvador de la
humanidad. Ya ni la chingan. Ese pobre muchacho sólo tiene la virtud de haber
nacido en los algodones, no sabe lo que es no tener para tragar un día, no ha
sentido la pobreza ni sabe lo que significa. Eso lo lleva a creer que el
gobierno es una empresa más y que todos los que ahí trabajen van a ser sus
empleados. Así lo hizo Toño y lo hizo su madre. ¿Cómo esperar que él haga cosas
distintas? Dice que se dedica a crear empleos. Pues ni modo que se ensucie sus
rosadas manos cargando las jabas de Coca Cola. A “güevo” tiene que contratar
trabajadores para que le hagan el trabajo sucio y tener ganancias
estratosféricas que le permitan seguir comprando la conciencia de la gente con
regalitos y el irse de viaje a Egipto, a ver el mundial de futbol y pasearse
por Europa.
Nayarit lo que menos necesita es un traficante de
influencias, lo que menos necesita es un falso redentor, lo que menos necesita
es un imberbe chiquillo tan pobre pero tan pobre que lo único que tiene es
dinero. Ya lo vimos con los funcionarios del gobierno actual. Nos han llevado
al fracaso. Espero que mis cuatro lectores no vayan a caer en la falsedad de
promesas y espejitos que este descendiente de árabe sin petróleo les quiere
vender. robertogbernal@gmail.com
PD. De invertido a
invertido, le voy mejor al ¡Cero ligas”! www.trincherauniversitaria.blogspot.mx
