El limbo según la religión cristiana
es el lugar o estado en el que residen las almas de las personas que mueren en
pecado original sin haber sido condenadas al Infierno. Limbo proviene del latín
limbus que
significa borde o límite, haciendo referencia al “borde del Infierno”. Por otro
lado, se usa la expresión popular “estar
en el limbo” para indicar que una persona está desconectada de
la realidad que lo rodea o un lugar misterioso donde acontecen cosas
inexplicables. Coloquialmente, la raza común como este escribano de la
trinchera, se dice que andar en el “limbo” es “andar en la pendeja”.
Y es que, los líderes del Sindicato de Personal Académico
de la UAN (SPAUAN), “andan en la pendeja” a pesar de que Nachito Peña, en su
tradicional incompetencia, no ha pagado salarios y prestaciones de diciembre. Dicen
que entre hoy y mañana pagan. Ojalá. Pero mientras son peras y manzanas,
Nachito Peña se zurró en el contrato colectivo de trabajo y en la ley federal
del trabajo y ademas cometió delitos establecidos en la ley general de responsabilidades
administrativas y, los líderes del SPAUAN, “en la pendeja”, como “niño del
limbo”.
Y digo que los lideres porque, a pesar de que en general
los académicos aglutinados en ese sindicato no han tenido la voluntad y tamaños
para movilizarse en defensa del contrato colectivo de trabajo, aún hay académicos
que por lo menos alcanzan a balbucear alguna protesta, como la que se desprende
del texto siguiente publicado por un profesor universitario: “El día diecinueve de este mes en una reunión de amigos su servidor al
igual que muchos universitarios repudiamos la falta de pago de quincenas de
diciembre y de aguinaldo, y señalé que en esta etapa por la que atraviesa
nuestro pais se tiene que tener una idea y visión renovada de lo que debe ser
el nuevo sindicalismo mexicano en general, y respecto a las universidades del
país y claro la nuestra la autónoma de Nayarit, aquí es donde nuestro sindicato
spauan, tiene un función sustantiva, proteger y defender nuestros derechos
laborales y creo que sucede todo lo contrario, pues deja que se violenten
nuestros derechos y no levanta la voz y tampoco informa de avances o acuerdos
tomados en relación al día en que los trabajadores académicos recibiremos
nuestros pagos, generando con ello aún más incertidumbre, de tal suerte que
debemos ser los trabajadores académicos, en nuestra calidad de custodios de
nuestro Contrato Colectivo de trabajo los que tomemos ese nuevo rumbo del
sindicalismo eligiendo verdaderos líderes, no secretarios, que obedezcan a una
forma obsoleta de dirigir la riendas de un sindicato tan importante como el
nuestro, de lo contrario seguiremos en las mismas. Bonita tarde”.
Nacho Peña viola las leyes y los lideres no mueven un
solo dedo para hacer que se les respeten las disposiciones contractuales y, si
no hacen ni eso, muchos menos realizan denuncias ante las instancias competentes
contra un rector que a todas luces no solo ha sido incompetente sino que es
potencial delincuente. Con otros lideres sindicales, Nacho Peña ya estuviera en
el bote. Pero aquí y en China “los guayabos dan guayabas” y no podemos esperar
otra cosa de ese tipo de liderazgos que no le sirven a la Universidad.
Dicho sea de paso, lo mismo sucede con Andrés Garcia, el Liberatiano
titular del Órgano Interno de Control de la UAN impuesto por Nachito Peña y los
lideres de los sectores. Dicho funcionario, de oficio, no necesita petición, puede
interponer denuncias ante indicios de delitos contra Nacho Peña. En este caso,
no sólo hay indicios sino prueba evidente de desviación de recursos y ejercicio
indebido de funciones para imponerle sanciones a Nachito Peña pero, la postura
del Liberatiano Andresito García es, por supuesto, la complicidad a través del
silencio. Para eso lo pusieron.
Los académicos del SPAUAN en general, en junio del próximo
año, tienen la posibilidad de rescatar esa organización. Pero dudo que lo
hagan. Los candidatos que les van a imponer vendrán desde las diferentes partes
de la mafia universitaria. Uno vendrá desde la FEUAN, otro impulsado por el “Pelón”
Hernandez Escobedo y otro más, por supuesto, por Nachito Peña avalado por
Carlito Muñoz. Con cualquiera da lo mismo, el SPAUAN seguiria siendo el “departamento
sindical de la rectoría”. Si los académicos en realidad quieren rescatar al
SPAUAN de las garras de la mafia, necesitan un candidato que no esté involucrado
con ellos, que sea independiente y, con ello seguramente que la Universidad
seria beneficiada. Pero tal como veo las cosas creo que el SPAUAN seguirá
siendo una organización sin trascendencia política en la defensa de los
derechos laborales como la convirtieron después del liderazgo de Hector Béjar
Fonseca.
Con un autentico sindicato titular del contrato, no anduviéramos
como limosneros mendingando nuestras salarios y prestaciones y soportanto a
rectores incompetentes como el actual. Si los académicos no rescatan al SPAUAN
y a pesar de eso se siguen manteniendo en sus filas, entonces los responsables
de la crisis universitaria ya no será la mafia, sino ese valemadrismo,
indolencia, apatia, comodidad o conveniencia de los académicos. Tendriamos la
universidad que merecemos porque, la mafia universitaria hace lo que tiene que
hacer. Es el tiempo de que el SPAUAN deje de estar como “Niño del Limbo”.
PD. Dicen que pagan entre
hoy y mañana. Sea como sea, Nachito Peña ya cometió delitos. Falta que lo
denuncien. NO lo harán los lideres de SETUAN ni SPAUAN, mucho menos Andrés
Garcia, titular del órgano Interno de Control. ¿Seguirá entonces la impunidad?