Por supuesto que
muchos Nayaritas seremos testigos de que, llegando AMLO a la presidencia de México,
habrá justicia para muchos Nayaritas, entre ellos para nosotros quienes hemos
estado soportando la corrupción universitaria sin que haya nadie en el estado
que la combata. Con AMLO, la esperanza renace.
El gobernador Echevarría no ha
podido cumplir los compromisos con el pueblo de Nayarit. Se comprometió a combatir
la corrupción y a la fecha no ha podido hacerlo. No ha dado ningún resultado de
ello. No se si porque sus funcionarios se dedican a la Dolce Vita y a
satisfacer sus ímpetus de vanidad o si porque es socio político de los
corruptos como Roberto Sandoval, Juan López Salazar y Nachito Peña junto con el
“Pelón” Hernández Escobedo, Roy Rubio, y otros tantos y tantos políticos que
han dañado las instituciones y que hoy disfrutan de la incapacidad del gobierno
estatal para hacer justicia. Y con la inseguridad ya ni digo nada, su gobierno
tampoco ha podido.
Todos sabemos que el gobernador le apuesta
al candidato “Canallín”. Puso todos los “huevos en una sola canasta”. Malo, muy
malo, señal de que no le aprendió nada de cómo hacer política a su padre, quien
cuando parecía que perdía, de todas maneras, ganaba. El Tigre Toño nunca perdía.
Cuando gobernó, tenia un Congreso en contra durante un trienio y asi de todas
maneras salió exitoso, dando resultados y cortando y orejas una vez que salió
del gobierno. Hoy, el gobernador hijo del Tigre, tiene un Congreso a modo y no
ha sido capaz de generar resultados tangibles.
A lo anterior se le sumará el hecho
de que el presidente de México no será el que anda apoyando, o sea al “Ricky
Riquin Canallín”, será AMLO. Y no me lo dijo Madam Zasú, pero, solo asesinando
a AMLO impedirán que asuma la presidencia. En ese contexto, ¿Cuál será el
futuro del gobierno Nayarita? Y no es que tenga un oráculo o bolita mágica en
casa, pero, sin duda alguna, el gobernador Echevarría se las verá negras.
Para empezar, con AMLO serán “encuerados”
todos los políticos corruptos que hoy son socios del gobernador Echevarría y
que por esa razón no son tocados. Obviamente, nosotros nos encargaremos que en
la “polla” vayan los corruptos universitarios, destacando entre ellos, por
supuesto, “El pelón” Hernández Escobedo, quien también se ha caracterizado por
ser aliado del gobernador Echevarría. De la misma manera, será “encuerado” Roberto
Sandoval quien con el pacto que hizo con el gobernador para llevarlo a la
gubernatura ya no se verá cobijado por el gobierno, aunque el ex gobernador
Sandoval haya buscado impunidad con un candidato al senado de parte de MORENA.
Entonces, un primer efecto será que los corruptos aliados del gobernador serán “balconeados”
y sancionados como corruptos sin la posibilidad de que el gobernador Echevarría
los siga protegiendo como hasta ahora.
Otro efecto. Los recursos federales.
Sin una buena relación con AMLO, el gobernador Echevarría tendrá dificultades
para traer recursos para Nayarit. Desde luego no es imposible. Con los recursos
presupuestados no hay problema, pero con los extraordinarios, será diferente.
Los diputados y senadores que tenga Nayarit, en el marco de los acuerdos parlamentarios
pueden hacer mucho por Nayarit, pero, en el caso del gobernador, no será tan fácil.
Le puede ayudar mucho en esa tarea el hecho inminente de que la madre del
gobernador será diputada federal. Y es que las dificultades para el gobernador
se explican porque los conductos para bajar recursos serán prioritariamente
pero no exclusivamente, los representantes populares de MORENA. O sea, con AMLO
le puede ir bien a Nayarit, pero no al gobierno del estado.
¿Cómo es que, a pesar de haber
jugado políticamente con el “Canallín”, le vaya bien al gobernador del estado?
Obvio, recomponiendo sus relaciones políticas con el poder federal, con AMLO.
El problema aquí es que su secretario general ha demostrado que es un inútil
para hacer operación política, el buenazo de Aníbal Montenegro no le ha
aligerado la carga al gobernador al grado tal que su inutilidad ha generado la
baja credibilidad social del gobierno estatal.
La solución la tiene en su padre. Sólo
el Tigre Toño puede ayudarle. Y, como buen padre, no creo que deje que su hijo
se hunda en la decepción social de su gobierno. Toño Echevarría tiene la manera
de recomponerle la relación con AMLO, tiene buenas relaciones en ese sentido y,
además, sabe como hacerlo. Creo pues que, una vez que AMLO esté sentado en la
silla de Los Pinos, será necesario que el padre del gobernador entre en escena
para sacar al ejecutivo del estado del hoyo político en que se metió debido a
la inutilidad en la operación y definición política del rumbo del gobierno.
PD. Los del STUAN
les informamos que nuestras demandas penales contra los corruptos
universitarios siguen dormidas en la fiscalía general del estado. Aparentemente
no hay voluntad del gobierno de consignarlas ante un juez para que se imparta
justicia. Sabemos perfectamente que solo caminarán si el gobernador da la
instrucción para que se consignen. Le damos el beneficio de la duda hasta la
elección presidencial para que nos de resultados. De ahí en fuera, si no hay
resultados, el gobernador será, para nosotros, cómplice de corruptos. Espero y
no sea asi.