A medida que se
acercan los tiempos de definición de candidatos, las presiones se hacen más
fuertes para la definición de quien será el candidato a las diputaciones y senadurías.
En el caso del distrito III, del sur del estado, las cosas no son la excepción,
también ahí se exige un mecanismo claro y transparente.
Ya no solamente los regidores de Bahía
de Banderas quieren que se desarrolle una encuesta para la definición del
candidato, sino que ahora también son los regidores panistas de Ixtlán del Río
quienes también están sumados al Chato Muñoz, pero exigen que la definición sea
con base en una encuesta que defina el sentir popular, el sentir de los
habitantes del distrito III. Para tales efectos, firmaron una carta que se la envían
a la dirigencia nacional del PAN que a la letra dice así: “ A las dirigencias
nacionales y estatales del PAN; Presentes. En nuestros días tenemos frente a
nosotros la gran posibilidad de triunfar en el próximo proceso electoral, y
para quienes habitamos el III distrito, se abre aún más esa posibilidad, luego
de que la designación del candidato a diputado federal se llevara a cabo
mediante la realización de una encuesta cuyo resultado propiciara que nos
represente el que esté mejor posicionado en el ánimo de la población. Por lo
tanto, exigimos que la señalada encuesta se lleva a cabo de manera profesional,
seria, legal y transparente y que al mismo tiempo llegue a los diez municipios
que conforman el distrito electoral. Nuestro deseo es obtener la victoria el
primer domingo de julio con un candidato que nos represente dignamente. Por una
patria ordenada y generosa. Firman los regidores de Ixtlán del Río, el
Licenciado Efraín García Franco, el ingeniero José Manuel Arellano Sandoval y
la Ciudadana Erika Elizabeth Saldívar López”.
Los regidores, sabedores de que el “Chato”
Muñoz es el que se encuentra mejor posicionado ante la población, exigen esa
encuesta para que se formalice así su candidatura. Y afirman que sea una
encuesta seria, responsable y profesional, que no haya truco ni sesgo de ningún
tipo, solamente que dicho instrumento estadístico refleje genuinamente el sentir
ciudadano de aquellos lares.
Lo importante de estas firmas no
solamente es el hecho de la exigencia en sí misma, sino que, además, quienes lo
hacen, dan la cara, no se esconden, y lo hacen asi porque saben qué es lo que
la gente del distrito III quiere, saben que en las preferencias electorales el
Chato Muñoz es el personaje idóneo que en estos momentos políticos se requiere
para que la formula panista sea competitiva en el proceso constitucional
electoral.
Pero, además, el planteamiento de un
mecanismo transparente en la designación del candidato a diputado federal, se
opone a las prácticas antidiluvianas que hay en todos los partidos, incluyendo
por supuesto al PAN. ¿Qué prácticas? Las de hacer acuerdos en lo oscurito,
hacer negociaciones políticas turbias entre quienes se encuentran en el pandero
para imponer a esposas o esposos, parientes de diverso kilataje, socios,
compadres o cualquier otro tipo de acuerdos negros que, en los hechos,
desplazan el interés de los ciudadanos y se anteponen los intereses sucios,
personales o de grupo.
Los regidores de Bahía de Banderas y
ahora los de Ixtlán del Río, saben a la perfección que el “Chato” Muñoz no
necesita de ese tipo de prácticas, saben que no requiere hacer negociaciones en
lo oscurito para lograr ser el candidato a la diputación del distrito III
porque ellos conocen perfectamente el sentir ciudadano de sus diversos lugares,
tienen el pulso político de la población y por eso saben que una encuesta,
seria y profesional, sería el mecanismo que reflejaría esos sentimientos
poblacionales.
Si la dirigencia Nacional y Estatal
del PAN decide imponer a un candidato que no esté muy posicionado en el electorado
tal como si lo está el “Chato” Muñoz, las posibilidades de triunfo seguramente
disminuirán, sobre todo porque el candidato de MORENA a la presidencia de la
república les dará na ventaja amplia a los candidatos de esta opción política
que anda muy posicionada entre los mexicanos. Así que a los panistas no les
queda de otra más que asumir ese mecanismo transparente que exigen ahora los
regidores de Ixtlán del Río, mecanismo que ya lo habían exigido los de Bahía de
Banderas, razón por la cual, las dirigencias del PAN no deben hacer oídos sordos
a la voz de sus propios soldados, no pueden ir a una guerra política con
soldados disgustados por las decisiones de sus líderes.
PD. Hoy estaremos
difundiendo nuestra exigencia de renuncia del rector de la UAN Nacho Peña por
su complicidad con los saqueadores y corruptos universitarios. Estaremos en uno
de los cruceros de dos avenidas importantes de la capital Nayarita. Y a la fiscalía
le estamos recordando que siga integrando las averiguaciones para que las
consigne ante un juez a fin de que este funcionario, cómplice de corruptos, sea
sancionado conforme a las leyes.