12 septiembre 2017

NAYARIT: ENTRE LA ESPERANZA Y LA DECEPCIÓN


La algarabía se nota. La inmensa mayoría de los ciudadanos ya festejan la terminación del oprobioso sexenio gubernamental de Roberto Sandoval y añoran la llegada del nuevo gobernante Echevarría, en quien se tiene depositada la esperanza de que se haga justicia. Por su parte, la pandilla de Sandoval termina a tambor batiente su sexenio: desvalijando las dependencias, otorgándose permisos por donde sea, llevándose lo más que puedan y, sobre todo, lanzando puños de saliva al por mayor para decir que su gobierno fue bueno. Con un poquito de vergüenza, Sandoval debería guardar un inteligente silencio.
            El arribo del nuevo gobernante ha generado una expectativa favorable. En él se han depositado las esperanzas de cambio. Nuestro pueblo, el pueblo de Nayarit merece que tengamos buenos gobiernos. Y, aunque no voté por Echevarría, como ciudadanos debemos estar dispuestos a darle el apoyo que necesite para que haga un buen gobierno. Tiene de mayoría de aliados en el congreso que le pueden ayudar a hacer un buen gobierno, aunque estos ya demostraron, en el mes que se han constituido como el poder soberano de Nayarit, que no hicieron nada por resolver los problemas tan graves. Se la pasaron tirando puños de saliva y rasgándose las vestiduras mientras el pueblo estamos casi en situación de pánico ante la ola de inseguridad que nos azota. “nadaron de muertito”.
            Sin embargo, los retos del nuevo gobernante son muchos. Desconocemos el trabajo real que haya hecho para arribar al gobierno tomando decisiones trascendentales. Sin embargo, las señales que ha mandado a la sociedad, aparentan que vamos a tener un gobierno protector de los corruptos. Y esto lo afirmo en principio por sus decisiones respecto a su relación con la Universidad Autónoma de Nayarit. ¿En qué cabeza cabe que le de la facultad de organizar concursos de oposición para nombrar a funcionarios gubernamentales? No dudo que puedan salir buenos profesionales ahí, pero ¿porque comenzando por avalar a quienes han hundido a la universidad en la más oprobiosa crisis de credibilidad social producto de la galopante corrupción e impunidad interna? Si la primera exigencia de la sociedad y el primer compromiso del propio gobernador en su campaña fue un combate frontal a la corrupción, entonces ¿por qué avalar a los corruptos para que le organicen los nombramientos de algunos de sus funcionarios?
            Si el compromiso del gobernador fue el combate frontal a la corrupción, entonces, en lugar de avalar a los corruptos, debió de impulsar que se traigan a Juan López Salazar, debió de impulsar que se transparente el ejercicio del presupuesto universitario, debió de impulsar que se transparente el fondo de pensiones de la UAN y se castiguen a los saqueadores, debió de impulsar que se investigue el fraude de los setenta millones de pesos donde está involucrado por omisión el propio rector Nacho Peña, debió de exigirle a  Nacho Peña que termine con los privilegios a los sectores de SPAUAN, SETUAN y FEUAN, debió de impulsar que se respeten las leyes laborales, debió de impulsar que se castigue a quienes desvían recursos universitarios para primarias y secundarias, en fin, debió impulsar el saneamiento de la institución y no avalar a quienes la han hundido en el descrédito social. La UAN no concursa ni siquiera las plazas de los académicos ¿Con qué cara se le pone a concursar los puestos públicos?
            Así como inicia el gobernador Echevarría no nos cause sorpresa que al rato ponga en el resto del gabinete a personajes que están señalados por la auditoria superior de la federación o a otros personajes por haber sido pública su participación en haber exonerado corruptos como Ney González. El gobernador Echevarría debe iniciar con el pie derecho su administración para no fallarle al pueblo. Las señales que está enviando con el caso del involucramiento de la universidad en el nombramiento de funcionarios gubernamentales da la pauta para que el pueblo comience a saborear la decepción. Sin duda alguna que ciudadanizar las decisiones públicas son un buen camino, pero no debe hacerse sobre la base de cobijar a los corruptos. Pero le faltan pocos días aun para iniciar su gobierno y puede recomponer las cosas, no hay necesidad de que la decepción popular llegue pronto. Nayarit no merece que se cobije a corruptos.
            Y desde aquí le mando un mensaje al gobernador Echevarría: Muchos universitarios estamos esperando, al igual que muchos ciudadanos Nayaritas, que se haga justicia. En los tribunales laborales que dependen de lo que será su gobierno, tenemos sendas demandas que son producto de las violaciones a las leyes laborales que hacen las autoridades universitarias. Roberto Sandoval las mantuvo congeladas durante todo su sexenio por su amasiato con las corruptas autoridades universitarias. Si usted gobernador Echevarría cobija a los violadores de las leyes laborales ¿Cómo vamos a pensar que usted nos va a hacer justicia? ¿Será otro Roberto Sandoval que tendrá amasiato con quienes han hundido a la Universidad en el pantano de la corrupción e impunidad? Si no es así, dé muestras en los hechos que no es verdad y que seguirá firme en su combate a la corrupción. Los discursos huecos y demagógicos déjelos para tiempos de campaña.

PD. Sospecho que hay algunos vivillos cercanos al gobernador Echevarría que se están aprovechando de su ignorancia respecto de la vida universitaria para llevar agua a su molino.

OTRA DENUNCIA CON NAVARRO ¿Y?

CON NAVARRO QUINTERO EN 2018 ¿Y?