El viernes pasado, a
través de un reportero, el “asalta rectorías” Juan López Salazar, hizo
declaraciones acerca de nuestra petición sobre su remoción como rector de la
UAN. Y bueno, para que no se confundan nuestros escasos lectores haremos las
precisiones correspondientes y emitiremos nuestra opinión para desenmascarar a
este ilegal funcionario.
Primero dice que el máximo órgano de gobierno en la
Universidad es el Consejo General Universitario. No dice nada nuevo ¿Por qué
creen ustedes mis escasos lectores que nuestra petici ón del
inicio del procedimiento de remoción la dirigimos a la comisión de
responsabilidades del Consejo General Universitario? A pesar de que son las
mafias universitarias los integrantes de esa comisión, ahí la dirigimos porque
así lo establece la reglamentación universitaria.
En segundo lugar dice que la autonomía está establecida
en la propia constitución política de Nayarit en su articulo 133. El “asalta
rectorías” debería leer la constitución y no presumir su ignorancia porque no
está en ese artículo sino en el 136.
En tercer lugar dice que yo atacaba al gobernador. Me pregunto: ¿qué
tiene que ver mis opiniones acerca del quehacer gubernamental y sobre el
ejecutivo estatal en el tema de la remoción del rector? Me dice que yo señalé
que el gobernador era ilegal, situación que jamás he sostenido, pero le paso
esa mentira y descalificación porque no tiene nada que ver en el tema que
estamos difundiendo.
En cuarto lugar dice que ataco a su familia. Falso,
también dice mentiras. Seguramente se refiere a la reproducción que hice en la
prensa de lo que se escribía en las redes sociales acerca de su respetable
esposa. Y lo hice no porque tenga nada en especial contra la dama en comento ni
porque sea misógino, sino porque hay sectores de la comunidad universitaria que
se quejan de cómo la respetable esposa del rector comete algunos abusos con el
presupuesto universitario. Y ahí, aunque sea dama, pero si comete actos de
corrupción y de privilegios, el hecho de tener condición de mujer y ser la
esposa del “asalta rectorías” no la exime de la critica. Que no use el
presupuesto universitario de manera privilegiada y no habría problema.
En quinto lugar por fin se refirió al tema. Estoy de
acuerdo en lo que dijo y lo transcribo: “Él (O sea yo) presentó ya un recurso de
remoción ante la comisión de responsabilidades que es la que debe de hacer un
dictamen, ya fue turnada a esta comisión de responsabilidades y tendrá que
darle respuesta correspondiente a él o si lo considera conveniente lo turnar á directamente ante el consejo general universitario y
definitivamente el único órgano colegiado autorizado para oír y atender este
asunto, es el propio consejo general universitario que seguramente habrá de
darle una respuesta puntual y clara a dichos planteamientos”.
En sexto lugar se defendió. Dijo que no es “farsante ni
arribista”. Es su palabra contra la mía pero eso lo definirán las autoridades
competentes ante quienes deberá probar que no lo es. Yo digo que “asaltó la
rectoría” que no cumplía los requisitos para ser rector y sin embargo usurpa la
función y eso es delito y quien los comete es un delincuente, aunque eso lo
determinará la autoridad que juzga delitos federales y por supuesto no es el
consejo general universitario con todo y su autonomía. Yo he solicitado que me
den la información de su historial académico y ellos la esconden, la clasifican
como confidencial. Les pido a mis escasos lectores que consulten la ley de
transparencia y acceso a la información pública y me digan si pedir las
constancias donde se le asignó carga horaria o actas de calificaciones de
exámenes o las actas donde haya fungido como sinodal en exámenes de tesis y
profesionales y otras cosas por el estilo es pedir información confidencial del
rector. Esa información no es personal para ser confidencial, es una
información donde se registra el quehacer institucional, por tanto es
información fundamental y pública. Pero como saben que eso lo puede llevar
directamente a la cárcel, se amafian y la clasifican como confidencial pisoteando con ello la ley de transparencia.
En séptimo lugar dice que es una autoridad legítima. Yo
no he cuestionado la legitimidad del rector, pero pudiera hacerlo porque para
elegirlo no votó la comunidad universitaria, votaron los representantes sin
haber consultado a sus representados y ahí no hay legitimidad. Lo que cuestiono
es su legalidad por no cumplir los requisitos de ley. Nunca ha ejercido la
academia y eso es requisito para ser rector según la propia ley y nuestra
autonomía que tanto señalan. Su nombramiento está fuera de la ley.
En octavo lugar dice que el consejo general universitario
es el único que puede decidir si se queda o se va de la rectoría. En el
procedimiento interno sin duda alguna que
es el consejo general universitario. Pero les aclaro a mis escasos lectores
que la autonomía y el consejo general universitario, aunque esté consagrada en
la constitución, no sirve para proteger presuntos delincuentes ni para cometer
actos de corrupción. Eso lo juzgaran las autoridades federales. Juan López
Salazar es un presunto delincuente por usurpar una función donde se maneja el
dinero del pueblo, donde se usa dinero del pueblo y se ejerce violando las
leyes.
En noveno lugar dice que le faltan dos años mas para
terminar. Es cierto, y yo pudiera decir que va a salir de la rectoría mañana.
Pero una cosa y otra no tienen la mas mínima trascendencia porque aunque
termine su periodo la responsabilidad le va a seguir hasta que la autoridad
federal diga que pasará con su caso. Si se va mañana y la autoridad le finca
responsabilidad tendrá que responder por cuatro años. Si le fincan
responsabilidad cuando termine su periodo lo sancionaran por los seis años de
usurpador.
En decimo lugar dice que ahí está dispuesto para
atendernos. De nada sirve. Lo hemos obligado tres veces a reunirse con nuestro
comité ejecutivo, hemos llegado a acuerdos para resolver los problemas
laborales y siempre se ha rajado. No tiene caso sentarse con un ilegal funcionario
cuya palabra no tiene valor, de todo se raja. Para finalizar pretende minimizar
nuestra petición bajo el argumento de que somos un sindicato minoritario. Si es
cierto, hemos resistido sus agresiones, sus violaciones al derecho de los
trabajadores, su discriminación y su intento por desaparecernos pero no ha
podido ni podrá. Y dice que nos respeta. Con un poquito de decencia y
vergüenza, otro rector ya hubiera renunciado. El ser un sindicato minoritario
no tiene nada que ver, así sea un estudiante el que haya hecho la petición
basado en la ley, seguiría el mismo procedimiento. La ley no se vota, se acata.
robertogbernal@gmail.com
PD. Dicen que el
“asalta rectorías” les dará 18 millones a la porra de la FEUAN para irse a Houston. ¡¡¡Y les niega las
reclasificaciones a nuestros trabajadores por 400 pesos al mes!! ¿No son chingaderas?
www.trincherauniversitaria.blogspot.mx