Después de haber pasado la noche buena y la navidad, y aún soportando las consecuencias que estas fiestas decembrinas implican, aquí estamos nuevamente con ustedes mis estimados como aguantadores cuatro lectores. Y como seguimos enfiestados, vamos a continuar divirtiéndonos un poco con los avatares y declaraciones de nuestros políticos que aspiran a la gubernatura de Nayarit. Hoy vamos a comentar las “fanfarroneadas” de uno de los políticos más controversiales en el actual proceso electoral.
Con el primero que vamos a empezar es con el que más posturas de esta naturaleza ha asumido. Es sin duda, Acosta Naranjo. Fíjense lo atrevido de este aspirante: sin reunir los requisitos constitucionales, siendo acusado de proteger delincuentes, señalado como presunto corrupto por no explicar el origen de los recursos que utiliza para promocionarse políticamente y por usar las instituciones mexicanas para favorecerse políticamente gracias al apoyo de su cónyuge político Calderón, por ser acusado de rajarse de los acuerdos con Martha Elena y asumir una postura de sinvergüenza, con todo ese lastre, con toda esa colota de dinosaurio, aún tiene la osadía de hacer un montón de “pifias”. Acosta se me asemeja como aquél jugador de póquer, que no tiene nada de juego para enfrentar a sus adversarios y sin embargo hace apuestas elevadas. Es la postura de los jugadores de póquer muy conocida y que se le llama “blofear”, y se refiere a aquel jugador osado que pretende asustar con el “petate del muerto” a sus adversarios. La diferencia es que el proceso electora no es un juego de póquer.
Todas las encuestas, amigas y no amigas, han demostrado que Acosta Naranjo no tiene aceptación más allá del 10% de las preferencias electorales, y eso por haber usado inmensos recursos que le proveyó su cónyuge político, Calderón, para ser usados al más puro estilo priista, regresándoles a la gente sus impuestos para luego pretender cobrárselos como favores políticos. Pues bien, después de todo un año de hacer eso, no pasó del 10% en las encuestas. La última se hizo hace escasamente ocho días con el mismo resultado. Entonces pues, Acosta es un aspirante con una gran cola y, por si fuera poco, con muy poca aceptación popular. Dijera Galileo Galilei cuando estaba a punto de la muerte: “y sin embargo se mueve”. Así Acosta, con todos esos antecedentes, sin embargo se mueve, habla, discursea agresivamente, blofea, reta. Es el típico político pandillero, el típico bandolero de la política que actúa como porro en lugar de presentar una postura política de “altura”, mesurada, de oposición fuerte pero no vulgar y corriente. Por eso es bueno recordar sus “fanfarronerías”.
Entre las que más sobresalen está aquella de que le están haciendo “guerra sucia”. Se ha desgarrado las vestiduras y ha gritado como plañidera mal pagada cuando le han recordado que trae una gran cola. Cuando lo acusaron de ser un protector de narcos, por estar vinculado al crimen organizado debido a su evidente complicidad en el caso del hoy prófugo de la justicia y ex diputado federal Julio César Godoy, pegó gritos estridentes señalando que había guerra sucia en su contra. Les pregunto a mis escasos lectores, ¿Difundir las verdades que ya circulaban a nivel nacional ¿es guerra sucia? ¿Acaso no fue el mismo Acosta Naranjo quien defendió perrunamente a Godoy Toscano en una entrevista con López Dóriga y con Carlos Marín? Mi buen amigazo Acosta se hace como los chivos, después de que se echa una exhalación por el ano, vulgarmente conocida como “pedo”, se asusta. Por eso quedó como “tonto útil” en ése sonado caso, en el que hasta Carlos Navarrete le pidió perdón al pueblo de México por ése “error”.
Luego otra de las consabidas “fanfarroneadas”de mi amigazo Acosta es aquella cuando dice “Me tienen miedo, están asustados, saben que les gano”. Seguramente que los priistas estaban a punto de morir pero de risa. Seguramente que el ataque de nervios que les agarró a los priistas ante tamaños retos, se lo curaron con unos buenos “chupes” y una buena botana. Han de haber concluido que es mejor tener “cuerdo” a Acosta y por eso han de haber acordado enviarle alguna ambulancia que lo lleve al marakame. Esas afirmaciones de mi amigo Acosta están buenas para enviárselas a alguno de esos cómicos que salen en la casa de la risa. ¿A quien en su sano juicio, sobre todo siendo aspirante a la gubernatura, se le ocurre decir estas sandeces cuando sabe que el PRI tiene todo para ganar y que la única manera de meterse a la pelea con posibilidades de éxito es con la unidad de todas las fuerzas de oposición y con un candidato que no esté tan cuestionado como Acosta? Esas posturas políticas bravuconas, pendencieras, propias de un político bocón, sólo evidencian la poca estatura intelectual de mi amigo Acosta. Hay más posturas de perdonavidas, pero esas se las voy a recordar en otras columnejas. robertogbernal@gmail.com
PD. Iba un homosexual en su auto cuando choca con una camionetona. Se baja, toma la llave de cruz y se lanza contra quien venia manejando esa camioneta. Resultó que era un sicario, quien al ver al enfurecido maricón corriendo afeminada pero amenazadoramente contra él, con llave de cruz lista para agredirlo, saca su AK-47 al mismo tiempo que exclamó: ¡Que “trais” pinche puñal! Como respuesta, en forma repentina, el sodomita cae de rodillas al suelo y poniendo la llave de cruz de frente al sicario le dice: ¡Por esta crucecita que yo tuve la culpa! Así Acosta, si no hay unidad, el PRI gana y entonces Acosta tendrá que tragarse sus palabras. www.cainay.blogspot.com
