Hasta el día de hoy pude escribir las estupideces que se me ocurren. Los dos días previos, dediqué la columneja a dos denuncias que mis escasos lectores me pidieron, uno se lo dediqué a la agresión de Ney al sindicato del CONALEP y el otro al desprecio del ayuntamiento capitalino a las demandas de los colonos de la Valle Matatipac. Hoy le voy a dedicar mis comentarios al destape que el corruptazo universitario Hernández Escobedo, mejor conocido en el mundo de las apuestas y de las carreras de caballos y de gallos como “el Pelón”, hizo de Castellón Fonseca como aspirante a la gubernatura.
Lo primero que se me antoja decir es que ése famoso destape no tiene nada de novedad. Ambos son compañeros de trapacerías en la Universidad, ambos cojean del mismo pie. Y no sólo cojean del mismo pie por taparse sus “cositas” al interior de la UAN, sino porque han evidenciado públicamente su amasiato político sin ningún rubor. Recuérdese cómo cuando Castellón Fonseca se “sacrificó” (yo digo que lo salvaron del ridículo social) en aras de que Navarro Quintero fuera candidato a gobernador, Acosta Naranjo, le regaló por su “sacrificio” la coordinación de la campaña de Miguel Ángel al mismo tiempo que le regaló candidaturas a presidentes municipales y diputados, en donde puso a algunos de sus incondicionales. Pues bien, en el contexto de esos regalos que Naranjo le dio a Castellón, también le reservó la diputación plurinominal número cuatro, par que la hoy chiquilla senadora fuera diputado local, pero renunció a ella y se la pasó a su compañero de mafia, o sea al “pelón” Hernández Escobedo, quien, sin ningún rubor, se dedico a traicionar al PRD y a hacer lo que el gobernador mandara en el congreso del estado. Mientras Naranjo le daba esos premios a Castellón Fonseca por su “sacrificio”, éste se dedicó a satanizar a Miguel Ángel Navarro. Le dolió hasta el alma que lo quitaran de la candidatura. Después, Naranjo le volvió a dar otro premio: la senaduría de primera minoría. Es decir, es Naranjo el responsable de que la Castellona y el mafioso universitario Hernández Escobedo, aún sigan en el pandero político pretendiendo conseguir cotos políticos para continuar medrando a la pobre y deteriorada universidad. Y todo gratis.
Yo siempre he dicho que Castellón es un tipo con suerte. Nada le ha costado, todo se lo han regalado, claro está, no por su linda cara, sino porque supo “engrasar” a quienes le podían dar todo. Es una complicidad mutua, una red de favores mutuos que se han construido desde la universidad. Yo te meto a la nómina, te pago algunas cosas del partido, pero luego me pagas con posiciones de esas que regala el sistema político. Y ahí está, es senador pluri, el “pelón” fue diputado pluri y qué bueno que no hay gobernador plurinominal porque seguramente le tocaba a Castellón. Una vez organicé una rifa y un amigo me dijo: véndele un boleto a Castellón. Le contesté que no porque se sacaba la lotería.
Pues bien, ese amasiato entre el corruptazo “pelón” y Castellón Fonseca, continúa. Ahora hacen esfuerzos conjuntos para conseguir más posiciones. Cuando yo conocí a Castellón, de verdad pensé que era un chico sano, sobre todo porque había sido de esos del morral y venía de una participación al lado de los movimientos estudiantiles progresistas. Pero apenas probó las miles del poder en la Universidad y sufrió una monstruosa mutación, se convirtió en un engendro político del cual algún día les contaré su verdadera historia, les narraré los intríngulis de su negro pasado, ese que ha estado oculto para la inmensa mayoría de la gente y que queda borrado ante la imagen que se construyó desde la Universidad y ahora desde el senado pero siempre con dinero del pueblo.
Si Castellón mostrara poquita más de decencia política, si tuviera un poquito menos de vergüenza, y fuera congruente con todo lo que dice que hace, no hubiera dejado que lo destapara un mafioso como aspirante a la gubernatura, no hubiera dejado que su vocero fuera jun potencial delincuente como es el “pelón” Hernández Escobedo. Mejor hubiera escogido a algún intelectual, a algún académico que haya hecho aportaciones científicas y que tuviera una solvencia moral reconocida ante la sociedad. Pero no. dejó que un borracho, pendenciero, drogadicto, corrupto y sempiterno líder sindical, fuera su “padrino” para aspirar a la gubernatura. Pero como dijera un amigo mío, no se le puede pedir peras al olmo, los guayabos dan guayabas. robertogbernal@gmail.com
PD. En la Universidad, el académico que aspire a ser rector será manchado si deja que este mafioso universitario lo destape como aspirante a la rectoría……..Hace días, un amigo se encontró a “El Pelón” Hernández Escobedo allá por plaza forum, ahí en el lugar de apuestas que se llama Play Station, andaba “hasta atrás”, al grado que le reclamó que yo había ofendido a su familia, en particular a su esposa. Jamás he dicho nada de la señora, merece todos mis respetos, sólo puse ante el público lo que denunciaron de ella cuando se dio el asunto de la tortura de niños en la primaria pirata de la UAN. Pero jamás he criticado a la señora esposa del “Pelón”. No confundan……. Si Castellón Fonseca escogió a un potencial delincuente para que lo “destapara” como aspirante a la gubernatura, mejor hubiera escogido a uno de mayor peso y no a un “chapulín” como el “Pelón”…….Por cierto, ¿De donde va a sacar lana Castellón para financiar su aspiración a gobernador? www.cainay.blogspot.com
