¿Se acuerdan de aquella
afirmación escandalosa que el entonces chaparrito gobernador, Ney González, le
reclamaba al aún gobernador Sandoval siendo éste alcalde capitalino? “¡Nomás
algo pasa y te escondes, no das la cara!” Así le dijo. Ahora se reedita la
historia. Nuevamente están las balaceras, levantones, ejecuciones y todo el
rosario de maldades que a los mortales ciudadanos nos pone con el Jesús en la
boca.
Pero
los Nayaritas no podemos estar en estado de indefensión. La mayoría de
políticos encumbrados no quieren cargar con el costo político que implica su
incapacidad para contener la ola de violencia. Al gobernador Sandoval tal
parece que ya le vale un soberano pepino el tema de la violencia. Por eso no da
la cara, está mudo. Y lo mismo pasa con los encargados de la fiscalía quienes
seguramente ya no realizarán ninguna acción más que esperar que asuma las
riendas del gobierno el gobernador Echevarría.
La
repartidera de culpas está por todos lados. Mi amigo José Luis Sánchez posteó
un comentario en las redes sociales: “Hasta el último minuto de su mandato Roberto
Sandoval Castañeda es el responsable de lo que ocurre en el estado. Él es el
responsable de la seguridad pública, junto con el encargado de despacho de la fiscalía,
también él gobierno federal. Ante la ola de asesinatos y los desaparecidos
ellos tienen que responder. La sociedad nayarita está en estado de indefensión
ante la criminalidad. Hay un vacío de poder y un estado fallido o un narco
estado”.
Para él los responsables son el gobernador
Sandoval, la fiscalía y el gobierno federal. Sin duda alguna eso es una
realidad, pero, ¿nadie más? ¿Los alcaldes que se van y los que llegan no tienen
responsabilidad alguna? ¿El congreso del estado no tiene responsabilidad
alguna? ¿Ante esta situación de emergencia social no pueden tomar decisiones
más que llamar a cuentas al encargado de la fiscalía? ¿Por qué no realizan un
punto de acuerdo para exigirle al gobierno federal que tome cartas en el
asunto? ¿Por qué no le fincan responsabilidades al gobernador dado que la
primera función del gobernador es la seguridad de los Nayaritas y si eso no se
cumple hasta juicio político se le puede hacer? ¿El gobernador electo
Echevarría no puede tomar cartas en el asunto? Si ya anda paseándose en la
ciudad de México para pedir dinero para Nayarit ¿porque no toma acción para resolver
el problema de la seguridad? ¿O nomás va actuar para pedir dinero, pero no para
tomar acciones en el tema de la seguridad? Sabemos que legalmente no puede
tomar decisiones, pero en los hechos ya debe tomarlas tal como lo está haciendo
como gobernador electo para presentarse ante las autoridades federales.
¿Qué es lo que quiero decir con este tipo de reflexiones?
Simple y sencillamente que todos tienen responsabilidad. En definitiva, en los
periodos de transición, siempre tiende a presentarse un vacío de poder tal como
lo señala mi amigo José Luis, pero depende también cómo se vea ese vacío de
poder. Es como el vaso medio lleno de agua, también lo puedes ver medio vacío.
Los que se van ya no quieren saber nada demostrando asi su debilidad, pero los
que llegan no quieren hacerse responsables de la papa caliente. En realidad,
tanto los que se van como los que llegan tienen en los hechos, y por compromiso
moral con la sociedad, responsabilidad en el tema.
Y más le debe interesar al gobernador electo que
se resuelva el problema porque una vez que tome posesión del cargo ya no tendrá
a quien echarle la culpa. Si la ola de violencia sigue azotando a los Nayaritas
y si esa ola nos mete en un estado de pánico, el responsable ahora será el
gobernador Echevarría y, si no resuelve eso, sin duda alguna será, de
inmediato, criticado por los ciudadanos e incluso, como lo señalé, será hasta
motivo de juicio político. No puede el gobernador Echevarría asumir una postura
de ignorar que los Nayaritas empezamos a tener temor de andar en la calle
simple y sencillamente porque no ha tomado posesión. Ya está funcionando como
gobernador, prueba de ello es que lo están recibiendo los funcionarios
federales, asi que, la papa caliente también le toca a él desde ahora. ¡El gobernador electo ya debe dar la cara!
PD. Aunque
no es santo de mi devoción, el único que se incluye como responsable, sin haber
tomado posesión del cargo, es Castellón Fonseca. Así lo declaró en un posteo
que hizo en el que reconoce que son las autoridades municipales, estatales y
federales los responsables de la seguridad. Y reconoce su responsabilidad aún
sin tomar posesión del cargo como alcalde capitalino. ¿Por qué no lo hace
también el gobernador electo? Lo único que le comento a Castellón es que pase
de la demagogia a los hechos. Con puños de saliva no se resuelve el problema……Les
comparto una opinión excelente narrada coloquialmente por un siempre atinado
cibernauta: “Aaah, como
le hacen al loco con sesudas opiniones sobre las razones "profundas"
de la ola de violencia. Escucho políticos hacer elaborados diagnósticos con la
pátina de lo "políticamente correcto". No le hagan al loco o al
sabio. Los señores narcos de la plaza se andan matando porque quedaron sin
cabeza. Pelean por determinar quién será en nuevo jefe. Y joden la parte más
frágil de la cadena. Súmenle que seguro otras bandas quieren entrar. Y los
señores policías tampoco tienen jefe. Andan sin mando. Al Sasasá le vale madre
lo que suceda. Quiere salir de la ratonera, no quesito. Así que la
descomposición social que padecemos, la falta de valores, las nulas
oportunidades de trabajo para los jóvenes, el fácil acceso al mundo de las
drogas muy adictivas, la narco cultura y otros factores, pesan. Pero el asunto
es otro. Y eso no se remedia con hacer desfilar por las calles de Tepic a los
Bom bom, ese pozole de federales, estatales, municipales, fuerzas armadas, que
transitan las calles gastando gasolina. Quizá, ya que Toñito Echevarría y sus
ilustres amigos como Chino Benítez, Arvizu, Razura, Palafox, Alonso y Bartolo,
la legión de súper hombres, tengan estrategias efectivas y un chipote chillón
adecuado, que venga a defendernos de ser víctimas colaterales. Mientras tanto,
mejor corremos!